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Día histórico: Canarias ya cuenta con su propia Ley de Renta Ciudadana

El Parlamento aprueba por unanimidad una de las iniciativas estrella del cuatripartito, que la consejera Noemí Santana considera "un primer paso" para poder luchar contra la pobreza y la exclusión social
La consejera de Derechos Sociales, Diversidad y Juventud del Gobierno de Canarias, Noemí Santana.
La consejera de Derechos Sociales, Diversidad y Juventud del Gobierno de Canarias, Noemí Santana. Sergio Méndez

La sesión plenaria de ayer en el Parlamento de Canarias fue del todo atípica, y por varios motivos. Entre ellos, que una iniciativa bandera del cuatripartito de izquierdas, como la Ley de Renta Ciudadana, fuera aprobada por unanimidad. Es más, en sus respectivas intervenciones, los diputados a un lado y otro de la bancada no repararon en elogios hacia la capacidad de diálogo que habían puesto en práctica, con cintura para negociar un total de 136 enmiendas al texto original, de las que se aceptaron finalmente 90. Hasta Vidina Espino, del Grupo Mixto, que acostumbra a lanzar duras críticas hacia el Ejecutivo desde la tribuna, puso en valor la labor “constructiva” que traerá consigo este proyecto legislativo.

Y es que la propuesta a la que se dio luz verde no solo viene a sustituir a la ya más que conocida Prestación Canaria de Inserción (PCI) -que ha supuesto un salvavidas para miles de familias isleñas desde su implantación en 2007-, sino que aporta un marco sobre el que trabajar en materias donde la región flaquea, como la pobreza y la exclusión social. Todavía parecían resonar los discursos que en la pasada legislatura entonaban portavoces como Román Rodríguez (NC), quien solía hablar de que el Archipiélago estaba “a la cola de los indicadores buenos y a la cabeza de los malos”. Unos parámetros sobre los que ha trabajado el Gobierno en este mandato, pero que continúan siendo un lastre para la Comunidad.

Tal es así, que la propia consejera de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud, Noemí Santana (Podemos), considerada madre de la nueva ley, manifestó su alegría por que saliera adelante, pero advirtiendo de que queda camino por recorrer: “Es un primer paso. Somos ambiciosas”, dijo. Y aunque Canarias ha sido la última autonomía española en legislar al respecto, subrayó que por su contenido “es pionera en nuestro país”, lo que arrancó el aplauso de la Cámara, aparte del personal de su departamento que se desplazó a la sede parlamentaria para ser testigo del histórico momento.

Hito que también fue valorado como tal por su antecesora en el cargo, Cristina Valido (CC). La nacionalista recordó que, en el anterior mandato, la Ley de Servicios Sociales supuso para ella un triunfo, algo de lo que estar orgullosa por su trascendencia para los habitantes de las Islas. Es por eso que, dijo, dirigiéndose a Santana, que a pesar de las diferencias ideológicas que les separan, “espero que disfrute de este día como yo lo hice”.

Un gesto en sintonía con la bajada de decibelios que se produjo en este punto del orden del día, en contraste con la otra estrella de la jornada, la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, frente a la que hubo importantes discrepancias, especialmente por parte del PP.

Con respecto a la renta ciudadana, el diputado popular Poli Suárez destacó su objetivo es intentar “llegar a esas familias que peor lo están pasando en nuestra tierra”, sobre todo a raíz de los problemas económicos que se arrastran desde la pandemia de la COVID-19 y los recientemente surgidos por la guerra en Ucrania. No obstante, admitió que, aunque su redacción no sea perfecta desde un punto de vista absoluto, es necesario verla en el contexto actual, donde es más prioritario poner la prestación en marcha con un acuerdo de mínimos que enfrascarse en años de debate, como ha sucedido en el pasado: “Es el mejor texto para este momento”.

La “hermana mayor” de la PCI, con líneas para casos extremos y jóvenes

En palabras de la diputada morada María del Río, la Ley de Renta Ciudadana es “la hermana mayor” de la PCI. Y haciendo honor a ese sobrenombre, sienta las bases para que todas las familias vulnerables que vivan en el Archipiélago tengan un mínimo de ingresos garantizado. Pero va más allá, al servir de paracaídas a los menores tutelados que, tal y como relataron varios de ellos a DIARIO DE AVISOS, se quedaban “en la calle” una vez cumplida la mayoría de edad; un aspecto sobre el que puso el acento Carmen Hernández (NC).

De igual manera, la iniciativa persigue habilitar mecanismos para el acompañamiento de las personas que no tengan un puesto de trabajo, bien de manera coyuntural o de larga duración, con medidas de inclusión sociolaboral. En este sentido, cabe resaltar que otro punto hace mención a la simplificación de trámites administrativos, con la supresión de las renovaciones, por ejemplo, que serán sustituidas por revisiones con carácter periódico. Aparte, se plantean tres líneas: una para situaciones extremas, otra para jóvenes y la última como complemento de los bajos salarios.

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