tribuna

9.540 millones para la recuperación

La ejecución presupuestaria del Gobierno de Canarias en 2022 alcanzó el 95,37% del presupuesto final, que superó los 10.000 millones de euros, sin incluir las partidas extraordinarias procedentes del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) europeo porque estas tienen de plazo hasta 2026 y su tramitación se efectúa de modo singular. Esa ejecución, factor clave para medir la eficiencia en la gestión pública, es la más alta de los últimos seis años, pese a la dificultad añadida de que las cuentas iniciales se vieron incrementadas en 1.164 millones a lo largo del pasado ejercicio por la relevante captación de recursos externos, procedentes del Estado español y de la Unión Europea. El pasado año el volumen de ejecución fue de 9.540 millones, es decir superó el 106% de las cantidades consignadas inicialmente en la ley de presupuestos de la Comunidad Canaria (8.952 millones). Incidiendo de manera y alcanzó aquel 95,37% incluyendo el aumento de los 1.164 millones durante el año. Incidiendo de manera relevante en la recuperación de la economía y del empleo en nuestra tierra.
A los presupuestos se suman las partidas correspondientes al MRR, fondo europeo de carácter extraordinario, del que ya se han ejecutado 211 millones de euros, el 28,4% de los 742 presupuestados, en los apenas quince meses desde que el Estado realizó las primeras transferencias. Quedan 934 a ejecutar en 48 meses, hasta el 31 de diciembre de 2026 y el ritmo de gestión hasta la fecha permite prever que se cumplirá el objetivo dentro de plazo.
El buen nivel de ejecución presupuestaria alcanzado no solo aguanta la comparación con otros gobiernos anteriores, sino que lo mejora, especialmente teniendo en cuenta que hemos sabido gestionar adecuadamente la mayor cantidad de recursos públicos disponibles en los últimos tres años, a consecuencia de las significativas transferencias de otras administraciones para paliar las sucesivas crisis que han marcado esta legislatura.
Reforzando la educación, la sanidad y las políticas sociales, además de incrementando la inversión pública y el apoyo a los sectores productivos. Reduciendo progresivamente la deuda de la comunidad autónoma, que es de 2.757 euros per cápita frente a la media estatal de 6.614 euros; estimada en el 13,2% de nuestro PIB, el porcentaje más bajo entre las comunidades autónomas. Una cuestión, esta última, de enorme importancia porque se reducen los intereses y el capital que paga la Comunidad, posibilitando dedicar esos recursos a los servicios públicos, y por no comprometer el futuro de las nuevas generaciones de canarias y canarios en años en los que la situación económica se puede tornar más dificultosa.
Lo hemos hecho, asimismo, sin necesidad de subir los impuestos y aplicando, eso sí, ajustes fiscales selectivos, tanto para los afectados por la erupción de La Palma como para sectores económicos muy expuestos a la inflación, como el ganadero. También se ha eliminado la práctica totalidad del impuesto del combustible a transportistas, ganaderos y agricultores. Además de implementar una reducción fiscal en el IRPF para las rentas medias y bajas que se aplicará en la próxima declaración de la renta. Los presupuestos suponen una parte importante del PIB canario y contribuyen, desde lo público, a la recuperación económica y a la generación de empleo. En un momento en que, gracias al esfuerzo colectivo de administraciones, empresas y trabajadores, del conjunto de la sociedad canaria, estamos superando el duro golpe de la pandemia y el confinamiento, que paralizó la economía. Con un notable crecimiento del PIB en 2022, del 8,2%, frente al 5,3% estatal, casi tres puntos más.

algo que no ocurría desde 2007
Así como con unos datos en la última Encuesta de Población Activa (EPA), la del cuarto trimestre de 2022, que colocan la tasa de desempleo de Canarias en el 14,6%, la más baja desde el año 2007. Situada a menos de dos puntos de la media estatal, algo que no ocurría desde hace quince años; y con una reducción de 4,37 puntos porcentuales con relación a la EPA del cuarto trimestre de 2021. Una EPA que incluye a más de 990.000 ocupados, el dato más alto de la historia, lo que supone una variación interanual de 52.800 ocupados más.
Previsiones recientes como las realizadas por BBVA Research, prestigioso servicio de estudios del BBV, son optimistas sobre la economía canaria. Señalan que en 2022 el crecimiento del PIB canario, con el 10,7%, duplicó el estatal (5,5%). Y proyectan un aumento del PIB del 2,8% en el presente ejercicio, duplicando nuevamente la media estatal, y algo mayor, del 3,3% en 2024. Estimando la creación de 69.000 nuevos empleos entre 2023 y 2024, lo que situaría la tasa de desempleo por debajo del 14%. Destacando en su informe que, tras levantarse el estado de alarma por la COVID, “el empleo volvió con relativa rapidez a los niveles previos, y ha continuado creciendo en 2022, y a un ritmo mayor que el del conjunto de España”. Un avance, asegura, impulsado principalmente “por la hostelería, el comercio, el sector público y las actividades profesionales”. Aunque esos buenos datos económicos y de empleo -a los que se suman los de comercio minorista, consumo o confianza empresarial- no hacen olvidar problemas acuciantes de la economía global que están afectando también a Canarias. Entre ellos la elevada inflación, que impacta duramente en la cesta de la compra, y la subida del precio del dinero, con su efecto negativo sobre los préstamos y las hipotecas.
Volviendo al análisis de los últimos seis años, en 2017 se ejecutaron 6.934 millones de euros y en el ejercicio más reciente, el de 2022, se llegó a 9.540 millones, por tanto, 2.606 millones más que entonces; en porcentaje, supuso un incremento del 37,58% entre los años 2017 y 2022. En operaciones corrientes -donde se incluyen gastos de personal, bienes corrientes y servicios, gastos financieros y transferencias corrientes- el grado de ejecución fue del 97,37%; en operaciones de capital -inversiones reales y transferencia de capital- del 81,04%.
En las secciones del presupuesto vinculadas a los servicios públicos la ejecución fue la siguiente: Servicio Canario de Salud (99,32%), Educación, universidades, cultura y deportes (96,90%), derechos sociales, igualdad, diversidad y juventud (94,76%), Servicio Canario de Empleo (81,38%) e Instituto Canario de la Vivienda (83,15%). Respecto a las relacionadas con inversiones y apoyo a los distintos sectores productivos del Archipiélago fue del 82,31% en obras públicas, transportes y vivienda; del 91,68% en agricultura, ganadería y pesca; del 91,86% en economía, conocimiento y empleo; y del 76,48% en turismo, industria y comercio.
El compromiso y la eficiencia del Gobierno de Canarias continuará con la ejecución del presupuesto de este año 2023, que se encuentra inicialmente dotado con 10.180 millones de euros, es decir, un 11,9% más que las cantidades de partida de 2022. Unas cuentas públicas que refuerzan las respuestas progresistas frente a las crisis que hemos mantenido a lo largo de la legislatura más compleja y difícil que se recuerde.
Unos presupuestos para 2023 en los que el gasto social asciende a 7.478 millones de euros, lo que supone un incremento del 9,46% con relación al pasado año. Las inversiones alcanzarán este año los 1.764 millones de euros, 377 millones más que en el ejercicio anterior, un incremento del 27,1%; y las políticas de apoyo a los distintos sectores productivos del Archipiélago aparecen dotadas con unos 400 millones de euros. Unas cuentas públicas, en definitiva, para contribuir a que Canarias tenga servicios públicos que respondan a las necesidades de la ciudadanía, una más sólida economía, un mayor empleo, unas mejores perspectivas de futuro.

*Vicepresidente y consejero de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos
del Gobierno de Canarias

TE PUEDE INTERESAR