Hace apenas unos días se dio a conocer una noticia en las redes sociales que volvió a traer a la memoria la desaparición de Madeleine McCann durante sus vacaciones en Portugal hace más de 15 años. Julia Faustyna, una joven de 21 años, ha lanzado una campaña en Instagram para compartir su creencia de que es la menor desaparecida y ha acumulado más de 600.000 seguidores en su cuenta.
Julia ha estado subiendo evidencias y fotos comparativas a sus redes sociales para demostrar que tiene detalles físicos que la unen a la familia McCann, y ha solicitado hacerse las pruebas de ADN con los padres de Madeleine para poder salir de dudas. Aunque no está clara su procedencia, la joven cree que hay muchos detalles físicos que la relacionan con la familia y quiere conocer la verdad.
Después de intentar contactar con Kate y Gerry McCann durante semanas, la supuesta Madeleine ha anunciado que está muy feliz de que el matrimonio haya accedido a hacerse el test. Sin embargo, hay muchas personas que cuestionan el por qué no se hace las pruebas con su familia actual.
Julia ha expresado que todas sus alarmas saltaron cuando sus padres no quisieron darle su certificado de nacimiento, y que su familia no le habla claramente sobre sus primeros años de vida, ni la apoya en esta investigación que está llevando a cabo. La joven ha declarado que tiene un gran parecido físico con Madeleine y que reconoce el rostro de su “agresor” en el retrato robot de la investigación policial.
Aunque las autoridades de Polonia, Alemania, Reino Unido han ignorado a la joven en sus pretensiones, los medios de comunicación han empezado a hacerse eco de su lucha. La joven está consiguiendo reconocimiento y ahora supuestamente el matrimonio ha accedido a realizarse las pruebas de ADN para saber si Julia es la niña desaparecida. Se espera que este sea el primer paso hacia la verdad sobre este caso tan mediático y angustioso.