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Turquía y Siria sufren dos terremotos que dejan más de 3.500 fallecidos

Los equipos de rescate buscan a numerosas personas atrapadas en miles de edificios que se han derrumbado en el sureste turco y norte sirio tras dos seísmos de 7,8 y 7,6 de magnitud
EL PRESIDENTE TURCO, RECEP TAYYIP ERDOGAN, HA SEÑALADO QUE EL SUCESO DE AYER ES “EL MAYOR DESASTRE DESDE EL TERREMOTO DE 1939”, QUE DEJÓ MÁS DE 30.000 MUERTOS. Europa Press
Turquía y Siria sufren dos terremotos que dejan más de 3.500 fallecidos. EP

Personas sepultadas bajo los escombros, gritos de dolor, de angustia, y centenares de almas caritativas dispuestas a ayudar. Las imágenes que nos llegaban ayer desde Turquía y Siria tras los dos terremotos que sacudieron ambos países nos devuelven a la memoria la fuerza de la naturaleza; lo frágil que es nuestra existencia ante fenómenos como el que ya vivimos en las Islas hace escasamente año y medio con el volcán de Cumbre Vieja, en La Palma.

Las sacudidas comenzaron en la madrugada del lunes. Entonces se registró una de 7,8 en la escala de Richter al sureste turco, de acuerdo con las autoridades locales, que tuvieron constancia de otro fuerte temblor de 7,6 alrededor de las 11.17 (hora canaria), apenas a unos 80 kilómetros de distancia respecto al primero. En total, los cálculos oficiales apuntaban al cierre de esta edición a que el suceso se habría cobrado la vida de más de 3.500 personas, aparte de 14.000 heridos.

Para el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, no hay duda de que nos encontramos ante “la mayor tragedia del último siglo”, sin contar el terremoto que hizo tambalear Erzincan y se saldó con más de 30.000 fallecidos y alrededor de 100.000 heridos. No obstante, en honor a las víctimas del actual enjambre sísmico, el Gobierno de Ankara procedió a decretar una semana entera de luto oficial, durante la cual las banderas ondearán a media asta.

El caso de Siria, con 1.500 muertos, no supone sino la guinda para una nación que lleva más de una década inmersa en una guerra civil. De hecho, los balances provenientes de este territorio se dividen entre las cifras ofrecidas por los representantes de un bando y otro, lo que dificulta poner en práctica una estrategia homogénea de atención a los afectados.

Quienes sí se han movilizado en este sentido han sido las ONG, que han comenzado campañas de recaudación de fondos para desplegar operativos de emergencia en la zona. Aunque también se han puesto en guardia los ciberdelincuentes, empleando engaños para llevar a cabo robos telemáticos, de ahí la importancia de recurrir a portales web oficiales y permanecer atentos a cualquier alerta.

En lo referente a apoyos internacionales, la UE ha anunciado que “está preparada para ayudar”; España ha activado la UME y el envío de transporte aéreo urgente para apoyar las tareas de búsqueda, y EE.UU. promete dar “toda la asistencia necesaria”.

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