conversaciones en los limoneros

Luis García Rebollo, capitán de Navío: “A los ingleses les cuesta reconocer la derrota de Nelson en Tenerife”

El presidente de la Tertulia Amigos del 25 de Julio concede una entrevista al DIARIO
Andrés Chaves y Luis García Rebollo | Fran Pallero

Luis García Rebollo, capitán de Navío de la Armada, preside desde 2021 la Tertulia Amigos del 25 de Julio, con sede en Santa Cruz de Tenerife. Mi intención era hablar con Luis de la propia actividad de la Tertulia, muy importante, pero poco a poco me fue ganando el relato de su experiencia como marino y de sus ideas para dar a conocer la historia de nuestros principales hombres de mar, desde Magallanes a Blas de Lezo, “que no tenía piernas pero sí cerebro”, me dice. Blas de Lezo es un héroe nacional de nuestro país al que se le está empezando a hacer justicia ahora. Dio caña a las armadas rivales, sobre todo a la inglesa, fue perdiendo miembros por el camino y puso muy arriba nuestra bandera, con especial mención a la defensa de Cartagena de Indias, donde les dio por todos lados a los británicos, que no salieron nunca de su asombro porque los defensores españoles eran infinitamente menos numerosos que los atacantes de Su Graciosa Majestad. Blas de Lezo perdió, en sus batallas, un ojo, un brazo y una pierna y aun así siguió peleando cuando fue menester y se convirtió en el almirante español que más proezas ha conseguido. Luis García Rebollo, mi interlocutor, nació en Melilla en 1958 y permanece hoy en la reserva. Ha navegado en el “Juan Sebastián de Elcano” por casi todos los mares y en otros buques de la Armada, incluyendo portaviones y dragaminas. Es especialista en inteligencia naval, electrónica, arquitectura naval por el Westlawn Institute of Marine Technology de los Estados Unidos, ha logrado premios por sus artículos sobre temas marítimos y yo podría ampliar muchas líneas más esta introducción, pero como pincelada biográfica es suficiente. Gran conversador, persona amable, lo sabe todo sobre nuestra Armada. Algunos de sus compañeros de la Tertulia Amigos del 25 de Julio me hablan mucho y muy bien de su labor en esta asociación.

-La Tertulia va adquiriendo renombre internacional. Viaja, investiga mucho y muy bien y aporta conocimientos a la historia. Sé que no me equivoco.

“Bueno, hacemos lo que podemos, pero naturalmente estamos contentos con lo que hemos logrado y siempre procuramos hacer bien las cosas”.

-¿Sus fines?

“Son sencillos: la investigación y la difusión de la historia de Canarias por medio del debate y del libre intercambio de ideas”.

-Además, tienen sede propia y medios para investigar.

“Sí, el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife nos concedió una sede en la calle Ruiz de Padrón y nos gustaría disponer de más medios para la investigación, pero todo se andará”.

-Una pregunta quizá recurrente, Luis, pero me gustaría saber tu opinión. ¿Por qué los ingleses no reconocen la paliza que le dimos a Nelson?

“Bueno, las cosas han mejorado en este sentido. Nosotros hemos viajado a Londres, hemos visitado la Nelson Society, hemos intercambiado impresiones con algunos de sus miembros y todo está cambiando en el sentido del reconocimiento de los hechos”.

-¿Pero?

“Pues que son reticentes a admitir del todo lo que ocurrió en Tenerife. Les cuesta reconocer la derrota de Nelson”.

-Resulta que el general Gutiérrez derrotó a Nelson, pero el famoso es Horacio Nelson.

“La figura del general Gutiérrez está siendo hoy reconocida por la historia, gracias a lo que se ha publicado sobre él, no sólo en lo relativo a la defensa de Tenerife, que fue quizá lo más relevante, sino también por su actuación en las Malvinas o en la recuperación de la isla de Menorca, desalojando a los ingleses”.

-Ustedes han homenajeado al general Gutiérrez en su pueblo, Aranda de Duero. Un acto de justicia.

“Sí, allí tiene erigido un busto, frente a la iglesia principal. Miembros de la Tertulia viajamos a Aranda para intervenir en diversos actos en su honor y fuimos espléndidamente tratados por sus autoridades municipales”.

-¿Cuántos especialistas en diversos temas integran la Tertulia?

“Se trata de un número invariable: 25 miembros numerarios. Cuando alguno causa baja o cumple 80 años, se le sustituye por un nuevo miembro, sin que los que cumplan 80 años se desvinculen totalmente de la Tertulia, todo lo contrario”.

-¿La llamada Batalla de Tenerife está suficientemente estudiada?

“Se han publicado muchos libros, ensayos y artículos sobre ella. Pero siempre surgen temas nuevos que te sorprenden. Nosotros hemos publicado veintitantos libros dedicados a la Gesta y han sido relatados en ellos asuntos muy diversos de esta batalla”.

-¿No te ilusiona recuperar los restos de la fragata Fox?

“Sería muy interesante que el Cabildo acometiera esta iniciativa, que es una especie de sueño histórico. Fíjate que la Fox no era realmente un barco de la Royal Navy, sino un buque corsario”.

(La llamada fragata HMS Fox, en realidad un cutter, una de las que componían la flota de Nelson el 22 de julio de 1797, fecha en la que se inició el combate, fue hundida por el fuego de las baterías de costa manejadas por las Milicias Canarias del general Gutiérrez. 97 marineros y oficiales ingleses murieron y el buque se fue al fondo con material diverso y muchas municiones. Los restos no han sido hallados, porque tampoco se han buscado demasiado).

-España e Inglaterra, siempre a la greña en la mar.

“Hasta que en 1806 el capitán de Navío Liniers echó a los británicos de Buenos Aires y entonces el Duque de Portland, que era entonces primer ministro británico, decide que suponía un error el enfrentamiento directo con España”.

Luis García Rebollo. | Fran Pallero

-Se ha dicho que Canarias ha cometido dos errores: haber dejado salir a Franco y no haber dejado entrar a Nelson. ¿Consideras un agravio esta frase?

“De lo primero no opino. Nuestra asociación, si se destaca por algo fundamental, es porque no se mete en política. En cuanto a lo segundo, puede que hoy hubiéramos sido un paraíso fiscal, o también puede que nos hubiesen aplicado sus políticas habituales con las tierras conquistadas; quién sabe, es difícil averiguar hechos que no ocurrieron. Sí se conoce cómo actuaban entonces los británicos”.

-¿Recaló Magallanes en Santa Cruz?

“Sí, hizo dos escalas en la isla, una en Santa Cruz y otra en La Tejita, en el sur”.

-¿Merece esta ciudad un museo naval?

“Santa Cruz es un puerto que está en la historia de la navegación. Y por supuesto que merece este museo naval que dices. La longitud en la navegación llegó a controlarse basándose en la posición geográfica de este puerto. Fue el astrónomo de Magallanes quien sugirió esta idea, que hizo fortuna. Y ya está bien de decir que Drake fue el primer marino que dio la vuelta al mundo. No es cierto, fue Juan Sebastián de Elcano, que estaba a las órdenes de Magallanes. Magallanes murió en Filipinas sin acabar su hazaña”.

-Ustedes han logrado que la Tertulia sea una especie de embajada móvil de Canarias.

“Bueno, algo parecido. Es que la historia de las islas me parece muy relevante. Y no digamos la naval. Tomé Cano, tinerfeño de Garachico, fue uno de los ingenieros navales más importantes del mundo, en su tiempo. Agustín de Bethencourt, portuense, fundó la Escuela de Ingenieros de Caminos de Madrid y desarrolló sus proyectos, impresionantes aun hoy, en la Rusia de los zares. En la Rusia actual es una figura venerada y en San Petersburgo, no te digo. Y cuando dices que la Tertulia es una embajada, es cierto porque cada miembro, cada tertuliano, supone un valor añadido. Hablamos de Agustín Bethencourt en la Económica de Madrid, con muchísima aceptación”.

(La conversación se dirige a los tiempos de la guerra de Cuba y del fracaso allí de nuestra Armada. Luis García Rebollo hace una explicación prolija de la política naval de la época, de las características de la munición de aquel tiempo, del grosor de la chapa de los barcos, de la destrucción, por mandato político, de los arsenales de la Armada Española, que eran excelentes. Reivindica la figura de Antequera, que era tinerfeño, lagunero más concretamente, vicealmirante de la Armada y ministro de Marina. Hubiera escrito un libro con las explicaciones de Luis García Rebollo, que lleva el mar en la sangre, pero no es posible en una entrevista periodística. Y, además, ese día yo tenía el pulso temblón y algunas de mis notas no he podido interpretarlas, alelado como estaba con las explicaciones del autor, entre otros libros, de “La primera escala de la expedición Magallanes-Elcano”, subtitulado “El problema de la longitud y la cartografía en la circunnavegación”, editado en 2020).

-Tu libro supone un exhaustivo trabajo de investigación.

“Se trata de un ensayo histórico de la primera circunnavegación del globo, que aborda aspectos náuticos poco conocidos, algunos inéditos, otros sorprendentes, muchos ocultos en la cartografía, en los instrumentos, en los derroteros y almanaques”.

-Y relacionados con la isla de Tenerife.

“Sí, en parte relacionados con la primera escala de la expedición de Magallanes en Tenerife, isla mencionada por Rui Falero, cosmógrafo y socio de Magallanes, como origen de longitudes”.

-Un hecho relevante para la navegación de la época.

“Exacto, muy relevante, porque abre una puerta insospechada a los secretos de la navegación, de la longitud y de la cartografía en la primera circunnavegación”.

(Esto lo cuenta Luis García Rebollo en la introducción de su obra citada, ilustrada con abundante material gráfico; un libro muy trabajado, unos hechos muy investigados y enormemente científicos que sólo un marino avezado en la historia y en los intrincados caminos de la navegación puede llevar a término. Y sigue:)

“Esta “milla cero” de la circunnavegación del globo se ubicaría en la primera escala en Tenerife, en el lugar donde, siguiendo el procedimiento descrito por Rui Falero, debieron compensar sus agujas antes de aventurarse a tan largo viaje. En una sorprendente convivencia con la otra “milla cero”, la del meridiano de la Línea de Demarcación del Tratado de Tordesillas”.

(El tratado de Tordesillas, por hacer un resumen, fue firmado en esta localidad, en 1494, entre los reyes de Castilla y Aragón, Isabel y Fernando, y Juan II de Portugal para repartirse la navegación por el Atlántico y las tierras del Nuevo Mundo, tras el Descubrimiento de América por Cristóbal Colón).

-La historia naval es apasionante, Luis. Me lo has dejado claro.

“Lo es y se escribe sobre las cenizas de los barcos”.

-¿Sabes que fui a Estocolmo a ver el buque de guerra Vasa? Me impresionó.

“Conozco la historia de este fracaso. Un barco de guerra sueco del siglo XVII, que se fue a pique nada más ser botado”.

(Es impresionante, porque se rescató prácticamente entero, años después, y se puede visitar. Las temperaturas gélidas del mar hicieron que se pudiera conservar durante siglos hasta la mantequilla que los marineros llevaban a bordo. Murieron treinta tripulantes y todavía no se ha encontrado al culpable de las modificaciones de los planos que hicieron que se escorara en la botadura y se hundiera. Estuvo sumergido en un mar oscuro 333 años. Luego fue rescatado entero y hoy se expone en un museo, con millones de visitantes. Historia de la navegación)

-Al margen del Vasa, que es la anécdota de una visita personal, gracias, Luis, a la Tertulia Amigos del 25 de Julio por sus aportaciones a nuestra historia. Y mi admiración hacia la Armada Española.

“Me quedó por citar el papel de la Armada en nuestras vidas. Por ejemplo, lleva la “hora atómica” en nuestro país desde San Fernando (Cádiz), elabora el almanaque náutico. Hacemos muchísimas cosas”.

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