Pese al aluvión de cayucos que encuentran hoy puerto seguro en La Restinga (El Hierro), el lugar más al sur de Canarias, el pueblo herreño se expresa en un clamor unánime y sin fisuras, a través de un acuerdo de todas y cada una las fuerzas políticas con representación en su Cabildo insular, a favor de la solidaridad y la integración de estos supervivientes que ahora, a su pesar, desbordan los recursos con los que cuentan para proporcionales alguna ventaja en pos de una vida mejor, la misma que persiguen y que se les niega en su tierra natal. Sin embargo, y de forma minoritaria, por suerte, algunas voces en algún momento han cuestionado la llegada de inmigrantes a Canarias.
En la Isla del Meridiano saben de sobra acerca de las penalidades del migrante, sea cual sea su raza y condición. No en balde, son muchos más los herreños y las herreñas que viven fuera que dentro de la tierra que moraron los bimbaches, pero siempre que pueden retornan a la tierra de sus ancestros, aunque solo sea con la excusa de acompañar a la Virgen de Los Reyes cuando baja desde su santuario de Sabinosa hasta la capital, Valverde.
La Fiscalía Provincial de Santa Cruz de Tenerife acusa a José Ignacio Vega Peinado como presunto autor de un delito de odio por discriminación de raza y solicita para el mismo una pena de tres años de cárcel en un juicio que está previsto se inicie hoy en la Audiencia tinerfeña. De la gravedad de los hechos da cuenta que se pide igualmente la imposición de una multa de casi 2.000 euros y que el procesado quede inhabilitado para desempeñar cualquier formación u oficio en el ámbito docente, deportivo y de tiempo libre durante once años. La Fiscalía pide también la destrucción, borrado o inutilización de los archivos con el nombre “Manifestaciones Canarias contra la Inmigración”, grupo formado en una red social integrado por 74 personas.
Según considera probado el Ministerio Público, Vega estaba al frente de Identitarios y por lo tanto era responsable de sus posicionamientos, difundió en las redes sociales, incluido un canal de videos “comentarios humillantes” como consecuencia de la llegada masiva de inmigrantes irregulares a Canarias a finales de 2020.
Problemas
A Vega le vienen de lejos los problemas con la justicia, dado que pasó más de un año en prisión tras agredir brutalmente a un profesor de Sociología de la Universidad de Valencia. Al docente en cuestión le habían reconocido una discapacidad del 20%, y se llevó una paliza por interceder en favor de un joven al que golpearon con un gato hidráulico en la cabeza, en hechos acaecidos el 23 de mayo de 1992, frente al Bar Canadá en la Avenida Antic Regne de València, como se recoge en sentencia firme.
A Vega le pudo más el temor a los tribunales y se fugó al Reino Unido, de donde lo tuvo que devolver la Interpol para que ingresara en la cárcel de Picassent tras ser condenado a cuatro años de prisión. El resultado fue que el joven agredido inicialmente estuvo ingresado 547 días por sus heridas, mientras que el profesor tuvo que ser hospitalizado 15 días y padeció una larga rehabilitación de 413 días. Respecto a las secuelas, el joven arrastra una parálisis en el lado derecho, dificultad al hablar y epilepsia, mientras que el profesor se quedó cojo debido a lesiones en el tobillo.
Mucho tiempo después, en su grupo de WhatsApp se hablaba de usar escopetas de caza respecto a los migrantes que llegan a Canarias, pero el apoyo a la manifestación en Tenerife de Identitarios en noviembre de 2021 fue ínfimo.