El pueblo de San Andrés ya estrena su remodelada calle El Dique, una de las arterias principales de este barrio santracrucero, que, a los pies del castillo, acoge numerosos locales dedicados a la restauración. Una obra que se ha dilatado casi tres meses en su finalización y que ayer el alcalde de la capital, José Manuel Bermúdez, visitó oficialmente para hacer entrega a los vecinos. La nueva vía, a partir de ahora, se transforma en peatonal al eliminar el tráfico rodado y los aparcamientos, y ha supuesto al Ayuntamiento un coste cercano al millón de euros.
Bermúdez afirmó que “la remodelación de la calle El Dique era una deuda pendiente con San Andrés y con todos los vecinos y comerciantes que sufrieron mucho cuando llegaban los temporales y arrasaban con todo. Una obra que hasta ahora no se había podido llevar a cabo al no tener protegido al pueblo con la actual escollera. Por tanto, no solo se ha cumplido con esta necesidad sino que también el pueblo ha ganado en vistosidad y amplitud, al darle más protagonismo al peatón y ayudar a impulsar la zona comercial, sobre todo de restaurantes y terrazas”.
Al respecto, el alcalde añadió que “tras esta obra la calle es más atractiva, con una iluminación adecuada a la entrada al pueblo y que con paso de los meses irá ganando en vistosidad a medida de que la jardinería se adapte al entorno”.
La remodelación de El Dique ha implicado reajustar su hasta ahora finalidad, destinada principalmente al tráfico y al aparcamiento, al de un espacio libre público donde la prioridad pasa a ser el uso peatonal y de ocio, dejando un carril para el tráfico restringido de vehículos de vecinos y carga y descarga.
Una supresión de estacionamientos que, según afirmó el regidor capitalino, “se compensa con las 300 plazas de parking que acabamos de abrir en la cabecera de playa de Las Teresitas, a las que se accede peatonalmente cruzando el puente”.
En este sentido, Bermúdez aseguró que el Ayuntamiento “está invirtiendo mucho en San Andrés y en obras tan importantes como el encauzamiento del barranco del Cercado, a la altura de la desembocadura, para que no se inunde más el pueblo con las lluvias. Además, hemos terminado el polideportivo y estamos apunto de concluir las obras del segundo puente que comunicará a los vecinos del Macizo de Anaga con el municipio a través de San Andrés, el cual está ejecutado casi al 50% y se prevé esté terminado a finales de año o principios de 2024”.
Igualmente, el alcalde anunció que “otras acciones en la zona serán asfaltar la calle de entrada que une San Andrés con Taganana hasta el puente, que se necesita urgentemente por el actual estado, además de continuar con el proyecto del castillo, cuya ejecución está en marcha. Quedan muchas cosas por hacer en este pueblo y todas buenas”, resaltó.
Demoras
Por su parte, el concejal de Obras e Infraestructuras de Santa Cruz de Tenerife, Javier Rivero, explicó que “la obra de la calle El Dique tenía que haber estado finalizada el pasado agosto, pero se ha entregado dos meses y medio después de la fecha prevista debido a la canalización que se ha tenido que realizar para la línea de fibra telefónica, lo cual retrasó el resto del proyecto en cuanto a la ejecución de los muros de contención hacia la avenida Marítima”. Asimismo, el concejal subrayó que “otro hecho que ha demorado la finalización de la obra ha sido poder acabar los trabajos de drenaje, con una mejor ejecución para la recogida de aguas fluviales, ya que se ha modificado en su totalidad para darle continuidad futura a la red pluvial y de saneamiento de la calle. Una acción que permitirá en un futuro próximo que el resto de vías aledañas puedan también conectarse a esta red”, dijo.
Al respecto, Rivero resaltó que “estas acciones añadidas en la obra han hecho que se incremente el presupuesto final de la remodelación de la calle El Dique hasta un total de 996.393,80 euros”.
En cuanto a los negocios ubicados en esta zona marítima, en su mayoría dedicados a la restauración, el edil apuntó que “la parte de ocio se beneficiará de la mejora viaria si también los empresarios hacen su parte, por lo que desde el Ayuntamiento se les está ayudando para que puedan instalar nuevas terrazas más cómodas y amplias. Hay que tener en cuenta que se ha pasado de una calle que contaba con una acera de 1.50 metros y zona de aparcamientos, a una vía que gana en amplitud, con una acera de 2.50 metros en la que podrán ubicarse terrazas sin necesidad de usar plataformas como hasta ahora y que, además, implicaban un gasto extra para los comerciantes”.
A partir de ahora, cafeterías y restaurantes podrán duplicar el espacio destinado a terrazas exteriores, pasando de los 12 metros de antes a los 22 metros actuales, lo que permitirá duplicar las mesas y, sobre todo, ubicarlas en un entorno más agradable y seguro que acompañará al visitante a pasear por el pueblo”, afirmó.
Con esta actuación, “no solo se ha adecuado la calzada y acera, sino que también se ha tenido en cuenta la adecuación paisajística del entorno con el acondicionamiento del alumbrado público eficiente y el uso de mobiliario urbano y de jardinería”, concluyó el concejal de Obras capitalino, Javier Rivero.