Con frecuencia, muchas personas adoptan perros o gatos sin tener en cuenta los gastos asociados a su cuidado, ya que las visitas al veterinario pueden ser costosas. Al adquirir una mascota, es importante considerar tanto la responsabilidad que conlleva como el gasto que implicará mantenerla saludable y bien cuidada. En algunos casos, estos costos son tan elevados que algunas personas se ven obligadas a regalar a su mascota o buscar otras soluciones. Por esta razón, la Fundación para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales, en colaboración con el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, han creado el programa #MejoresAmigos con el objetivo de promover el cuidado y bienestar de las mascotas y que puedas llevarlas al veterinario gratis.
Este programa brinda ayuda veterinaria gratuita a personas en situación de vulnerabilidad, permitiéndoles acceder a asistencia sin costo. Los beneficiarios de este programa incluyen personas mayores que viven solas, aquellos que viven en condiciones precarias a pesar de tener una vivienda, víctimas de violencia de género que no están cubiertas por el programa Viopet y personas sin hogar.
Los animales que serán considerados para recibir esta asistencia incluyen no solo perros y gatos, sino también cualquier otro con el cual la persona demuestre tener un vínculo afectivo y conviva con la persona que lo solicite.
De acuerdo con la página web del ministerio, la responsabilidad de pagar por los servicios veterinarios recae en la FAADA después de que hayan sido utilizados. Además, será esta asociación la encargada de buscar un centro veterinario para aquellos animales que lo necesiten. Los servicios incluidos en este programa son: vacunación, identificación, esterilización, desparasitación, eutanasia justificada e incineración del animal.
Cómo solicitar la ayuda
Se puede llevar a cabo la tramitación y gestión de la ayuda a través de los servicios sociales y la FAADA. Para ello, es necesario inscribirse en el programa ‘Mejores Amigos’, donde se debe presentar la solicitud de soporte y el certificado de situación de vulnerabilidad. La solicitud y la activación del proceso deben realizarse a través de los servicios sociales municipales de la localidad de residencia.
Obviamente, para poder ser beneficiario, hay que alegar estar en alguna de esas situaciones y, además, pasar el filtro para verificar que el vínculo entre la persona y el animal es positivo.