El Cabildo de La Palma, a través de la Consejería de Infraestructuras, trabaja desde ayer para dar respuesta al gran desprendimiento que se ha producido en la LP-2 a la altura del kilómetro 55, en el acceso al Puerto de Tazacorte, según informó la Corporación local.
El consejero del Área, Darwin Rodríguez, destacó que con esta actuación se pretende sanear y proteger los taludes de la vía, con la consiguiente mejora de la seguridad vial en esta zona amenazada por la disgregación de bloques rocosos producida por la erosión e intrusión marina.
Apuntó que, de esa manera, se conseguirá evitar la continua caída de bloques de rocas que se ha producido en los últimos meses y que incluso en la última semana provocó que se tuviera que cerrar el tránsito por la misma. A estas circunstancias se suman las recientes lluvias y el hecho de entrar en un periodo en el que las precipitaciones pueden ser más constantes, por lo que se hace precisa una pronta intervención.
Como consecuencia de esto, actualmente está cortada al paso de vehículos esta carretera, con un tránsito de más de 4.000 vehículos diarios y que une el núcleo de Tazacorte con el barrio del Puerto, siendo una vía que está enmarcada en las obras de la carretera de circunvalación.
Por su parte, el presidente insular, Sergio Rodríguez, hizo hincapié en el trabajo continuo que se sigue realizando desde esta área en el mantenimiento y mejora de las condiciones de seguridad en toda la red insular de carreteras. Es objetivo del Cabildo, apuntó, el intervenir en todos aquellos puntos que supongan un riesgo para los usuarios de la vía.
Será una empresa de trabajos verticales la que ejecute las obras que permitirán la retirada de las rocas, para posteriormente proceder al gunitado e instalación de una malla de triple torsión, así como al limpiado y vaciado de los muros.
Los trabajos comenzaron ayer, restringiéndose el tránsito de vehículos y permitiendo a los viandantes su utilización fuera de los horarios de trabajo.
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