En la tarde de ayer martes, se produjo uno de los hechos más vergonzosos en la historia de la televisión pública de Canarias. El periodista Francisco Pomares, que intervenía en directo en el programa vespertino de la Televisión Autonómica, Conecta Canarias, que se emite desde Las Palmas de Gran Canaria, fue censurado por la presentadora del espacio en el momento que el colaborador ofrecía una primicia en el canal, adelantada minutos antes por la Cadena SER, relativa a la imputación de cuatro empresarios canarios por delito fiscal por su participación en la venta de material sanitario al Gobierno regional durante la pandemia del COVID.
Cuando Pomares comenzó a dar cuenta de los detalles del auto judicial que obraba en su poder, la conductora del espacio, Helena San Pedro, le cortó tajantemente, quitándole el turno de intervención. El veterano periodista, extrañado, aseguró que la información que aportaba guardaba relación con lo que se estaba debatiendo en ese momento, a lo que la presentadora respondió retirándole definitivamente la palabra y dejándole muy claro que eran “ordenes de la dirección del programa”, a lo que el informador censurado respondió atónito con un “¿perdón, órdenes de qué?”. La expresión de desconcierto y gran malestar de Francisco Pomares fue evidente, y por supuesto muy justificada, en el resto de la tertulia.
El programa Conecta Canarias, está producido por la mercantil, EtiAzul que dirige el periodista Pedro Guerra. Esta productora ha estado envuelta el pasado año en varios escándalos relacionados con las audiencias de algunas de sus producciones.
Los trabajadores reaccionan
La reacción del comité de empresa de los trabajadores del ente público Radiotelevisión Canaria, no se hizo esperar. En la noche del martes, publicó un durísimo comunicado relacionado con este vergonzoso episodio de censura en una televisión pública. Según reza en el texto remitido a DIARIO DE AVISOS, “la plantilla de trabajadores de los Servicios Informativos de Televisión Canaria manifestamos nuestro total rechazo a cualquier tipo de censura que se promueva en nuestra cadena, tal y como ocurrió en este martes, 27 de febrero en el programa Conecta Canarias y que dejó sin poder expresarse a uno de los contertulios participantes en el mismo”. El comunicado concluye expresando la solidaridad de los trabajadores y el total apoyo a Francisco Pomares, cuya intervención fue censurada en dicho programa.
También durante la noche se produjeron declaraciones de muchos de los periodistas y presentadores históricos de la cadena, expresando su repulsa a este hecho insólito, que jamás se ha producido en los 25 años de historia del canal autonómico. En este sentido, el popular presentador de deportes de la Televisión Autonómica, Armando Vallejo, expresaba literalmente en sus redes sociales que “No me voy a esconder. Esto es bochornoso para todos los que trabajamos en RTVC. No me representa y me indigna”. Otros informadores como Pablo Socorro, pedían en sus redes la convocatoria de manera urgente de la Mesa de Control de la Radiotelevisión Canaria en el Parlamento para analizar la gravedad de lo ocurrido.
Este grave episodio que atenta contra la libertad de expresión en un medio de comunicación público, será la primera ‘papa caliente’ con la que tendrá que lidiar la funcionaria María Méndez, recientemente nombrada Administradora General de la Radiotelevisión Canaria.
Este programa, a pesar de su elevado presupuesto, es uno de los que registran una audiencia más deficitaria en los datos diarios de la Televisión Autonómica. A pesar del empeño de sus productores, el programa no levanta vuelo en las tardes de la Televisión Canaria.