La colección de arte de la Fundación CajaCanarias ha engrosado su catálogo mediante la donación de dos obras realizadas por la artista tinerfeña María Belén Morales. Su hijo, Federico Castro Morales, hizo entrega de sendas esculturas, que forman parte de la serie Mujer desintegrada, realizada en 1970.
Además de Federico Castro Morales, el acto de donación contó con la presencia de Margarita Ramos y Óliver González, presidenta y director general de la Fundación CajaCanarias, respectivamente, así como de Raquel Luis Rodríguez y Manuel Hernández, responsables del Área de Cultura de la entidad.
Estas dos esculturas (Mujer desintegrada II y Mujer desintegrada III) están realizadas en madera tallada y ensamblada, con incorporación de metal (cobre) en una de ellas. Las piezas representan dos figuras que se acompañan la una a la otra y consiguen trasmitir al espectador que las contempla una sensación de paz y tranquilidad.