Los enfermos con cefalea en racimo o cefalea de Horton podrán recibir la oxigenoterapia domiciliaria si así lo prescribe su neurólogo tras ser finalmente reconocida como tratamiento por parte del Servicio Canario de Salud (SCS), tras una reunión mantenida ayer en Santa Cruz de Tenerife con la Plataforma de Afectados por la Cefalea de Racimo de Canarias.
Los responsables de SCS informaron al fundador de esta asociación, Juan Carlos Núñez, de que un grupo de neurólogos de los hospitales de las Islas elaboraron un protocolo de atención para esos pacientes que ha sido admitido por la dirección de Programas Asistenciales y otros departamentos, y que se activará antes de 90 días. De esta manera, los neurólogos podrán prescribir la oxigenoterapia para ellos.
Hace un año, Juan Carlos y su hijo Yeray denunciaron, en DIARIO DE AVISOS, que más de un centenar de canarios sufrirían de manera más intensa la cefalea en racimos o de Horton, un dolor tan insoportable, agresivo e incapacitante que no solo pueden llegan a desmayarse, sino que puede llegar a tener ideas suicidas.
Yeray, que padece una cefalea de racimo crónica (los periodos de remisión no desaparecen) y además una migraña crónica, sufría insoportables dolores diarios, entre siete y diez episodios cada noche, de una duración de entre 20 minutos a varias horas. A raiz de esta denuncia, el área de Salud de Tenerife autorizó el tratamiento de oxigenoterapia, lo que ha supuesto una “mejora notable” de su calidad y esperanza de vida, al disminuir las horas de dolor.
En una patología que es crónica e incurable, la inhalación de oxígeno se ha incorporado como tratamiento coadyuvante, con notable evidencia científica asociada a su uso en este trastorno, con grandes beneficios sobre el paciente, evitando nuevas patologías por los fármacos y reducción de costes sanitarios. De hecho, la Sociedad Española de Neurología (SEN) alaba la terapia con oxígeno como tratamiento sintomático al ser eficaz y con pocos efectos secundarios.
Los tratamientos farmacológicos de choque son a base de de triptanes, pero solo puede administrarse dos veces al día como máximo (cuando suelen padecer cinco o siete crisis diarias) además de generar efectos secundarios, o bien administrar cortisona en altas dosis o el bótox. Cuando no mejora la situación, y la cefalea se ha cronificado, se puede realizar una operación quirúrgica, como a la que se enfrentará Yeray en el HUC, con la colocación de un neuroestimulador profundo.
Esta mañana, el Diputado del Común, Rafael Yanes, se reunirá con la Plataforma de Afectados para conocer los últimos avances en relación a la oxigenoterapia domiciliaria. Insistirán en que Sanidad remita instrucciones a las Urgencias de los Centros de Salud y Hospitales para que esos pacientes sean atendidos de manera prioritaria en el caso de llegar con crisis esporádicas para paliar su intenso dolor, el aumento de los días de consultas hospitalarias y dotarlos de más especialistas. Por último, demandan rapidez para reconocer su grado de discapacidad.