Amid, Medalla de Oro

Amid Achí Fadul, un canario nacido en Siria, recogerá la Medalla de Oro de Canarias el día 30 de mayo. Pocas distinciones más merecidas. Trabajador incansable, dotado de una inteligencia poco común, Amid hizo suya esta tierra, echó raíces en ella, aquí conoció a su esposa, Lourdes, y aquí nacieron sus hijos. Han existido también tristezas en esta trayectoria vital, a las que acompaña un éxito excepcional en la vida comercial de este hombre, dotado de una gran capacidad para los negocios, para crear puestos de trabajo y para aportar riqueza a la tierra que lo acogió, primero con absurdo recelo y después con unánime aceptación. Una tierra difícil, a pesar de su falsa fama de cosmopolitismo y de bondadosos principios. Yo mismo tuve alguna diferencia con Amid, siempre por mi culpa, y más por mi condición, en su día, de enfant terrible del periodismo –yo estaba equivocado—, que por alguna otra causa razonable. A partir del 30 de mayo, Amid Achí será más canario que yo mismo, y podrá lucir la Medalla de Oro que esta comunidad autónoma concede a personas que han trabajado mucho y bien por ella. Naturalmente que yo no estoy de acuerdo con algunas otras distinciones concedidas años atrás, pero esta es indiscutible, justa y merecida. Me siento muy orgulloso de ser su amigo y de que suba a ese escenario para recibir un reconocimiento que se había retrasado en el tiempo. Y Amid sentirá la satisfacción de que se reconocen sus méritos, se le quiere y se le respeta en el lugar en que vive y que ha hecho suyo. Quiero no quedarme fuera de quienes valoran su trayectoria y de los que aprecian su amistad sincera y su sentido común. Tengo testimonios sobrados de que lo que digo es cierto. Enhorabuena, amigo.