En las últimas semanas el Gobierno de Canarias y el PSOE se han enzarzado en un debate político de acusaciones sobre las listas de espera, acusando la oposición a Sanidad de faltar a la verdad” y “falsear” los datos y “meter pacientes bajo la alfombra”.
La consejera Esther Monzón recordó en el Parlamento que el plan Activa, se han traducido en una reducción de la lista de espera quirúrgica de 6,4 puntos, porcentaje que se eleva al 21,9% entre los pacientes con espera de más de seis meses; y una disminución de la demora media a 127,4 días. También ha mejorado la lista de espera de consultas (-3,66%) y, por contra, ha aumentado la de las pruebas diagnósticas (0,9%).
Afirma con estos datos “un cambio de tendencia en comparación con la gestión sanitaria de la pasada legislatura”, que consideró “un desastre” que certifican los datos de espera de entonces y los “nueve cambios de directivos” habidos en esta área.
Por su parte, el PSOE ve “poco creíble” la reducción de la lista de espera quirúrgica en un 21,9% “con solo” un ligero aumento de las pruebas diagnósticas, por cuanto no hay más actividad sanitaria, ni pública ni privada, a pesar de que las derivaciones a la concertada haya aumentado.
Esta mejora se debe a que a los pacientes los está “metiendo en los cajones, detrás de las cortinas y bajo las alfombras”, sobre todo los que llevan más de seis meses esperando por una intervención, a los que coloca en la lista no estructural si rechazan una cita. “Se han dado instrucciones para paralizar la citación en la atención especializada”, denuncia.