Nacer en un McDonald’s no es, desde luego, algo común ni habitual. Precisamente por eso lo que le ocurrió a Alandria Worthy es tan llamativo como extraño. Embarazada, sus contracciones se intensificaron tanto que, al final, acabó dando a luz en los baños de un restaurante de comida rápida.
Cuando su pareja conducía, Alandria le dijo que no llegaba, que tenía que parar para poder dar a luz «donde fuera». El lugar elegido fue un McDonald’s, porque era lo único que encontraron abierto. Nada más entrar al baño, Alandria rompió aguas.
Los gritos de Alandria atrajeron la atención de la encargada del restaurante, Tunisia Woodward. «Entré al baño, no vi a nadie, pero vi unos pies (debajo de la puerta)», dijo.
«Abrí, y ella estaba en el inodoro recostada, gritando. Entonces le dije a mi equipo: ‘Vamos a tener un bebé hoy», cuenta Woodward.
Todos los empleados se pusieron manos a la obra. En menos de 15 minutos después nació Nandi Ariyah Moremi Phillips, la primera niña del mundo que nace en un McDonald’s. Ahora los trabajadores le han puesto el nombre de Pequeño nugget.