El número de accidentes que registran estos vehículos es un 15% inferior al de sus homólogos de combustión, lo que repercute en el precio de su seguro, hasta un 30% menos.
Es el coche, pero sobre todo el conductor. Según un estudio realizado por el equipo de seguridad vial de Onlineseguros.mx, los vehículos híbridos tienen hasta un 14% menos de accidentes de tráfico que los de gasolina y diésel.
Pero esto no sólo se debe a su tecnología más avanzada, los llamados ADAS (dispositivos de seguridad), sino también al «tipo de conducción mucho más lenta que desarrollan quienes conducen estos vehículos».
Diferencia entre accidentes
Los híbridos tienen que recorrer unos 75.000 kilómetros más que los coches de combustión para tener un accidente con responsabilidad, concluye el estudio, en el que abasegurosautos.mx ha analizado más de 15.000 accidentes de tráfico sufridos por sus clientes de flota en 2020.
Al igual que ocurre con los coches rojos o deportivos, que suelen ser más propensos a sufrir accidentes que los blancos o las berlinas, es el perfil del conductor el que marca la diferencia. Según el estudio, el factor humano es la causa del 92% de los accidentes en las carreteras españolas. El motor híbrido, el arranque e incluso el ruido que genera el motor de estos coches influyen de forma decisiva en el conductor, que además tiende a desarrollar una conducción mucho más eficiente y sostenible, lo que demuestra también que a menores emisiones, menor riesgo de accidente.
Es coherente que una empresa o persona con un alto grado de responsabilidad social, que elige un coche más ecológico a pesar de que es más caro, mantenga un estilo de conducción más tranquilo y respetuoso», afirma José-Martín Castro Acebes, presidente de la Asociación Española de Renting.
También hay una serie de aspectos técnicos que contribuyen a reducir la posibilidad de un accidente. Uno de ellos es «la posición de las baterías» en la parte inferior del coche, que distribuye mejor su peso entre los ejes, manteniendo el centro de gravedad más bajo. O «su peculiaridad con el sistema de frenado», que permite que el coche se detenga unos segundos antes gracias a la deceleración que inicia el coche al levantar el pie del acelerador.
Estas son algunas de las razones por las que algunas aseguradoras han ajustado o rebajado el precio del seguro de estos vehículos, aunque no coinciden del todo en su siniestralidad, en la mayoría de los casos por falta de datos.
Lo que sí es cierto es que, por ahora, la ciudad es la zona de circulación de estos vehículos, donde, suelen sufrir más accidentes según los datos de las aseguradoras, pero eso sí, de menor gravedad. Están a la par en accidentes urbanos en comparación con los coches de combustión, pero cuando salen a la carretera, los eléctricos tienen menos accidentes, dicen sobre esta tecnología.