Existen varios modelos dietéticos que se basan en explotar algunos de los mecanismos inducidos por el ayuno, término utilizado habitualmente para referirse a la privación de alimentos sólidos (en un sentido más estricto, el término significa la privación total de alimentos sólidos, agua y otros líquidos).
Entre las propuestas dietéticas que recurren a un periodo de ayuno temporal se incluye la dieta 16:8, que implica un intervalo de ayuno de 16 horas.
También merece la pena mencionar la Tecnología que Imita el Ayuno, también conocida como Fasting Mimicking Diet, a menudo conocida por sus siglas FMD, un modelo dietético ideado por el biogerontólogo italoamericano Valter Longo, director del Longevity Institute de la Universidad del Sur de California, uno de los principales centros de investigación sobre el envejecimiento y las enfermedades relacionadas.
La dieta FMD, a diferencia de la dieta 16:8, no implica un largo periodo de ayuno, pero está estructurada de forma que «imita» sus efectos.
Ayuno y autofagia celular
El ayuno es una condición de privación de alimentos que tiene diversos efectos en el organismo. Evidentemente, son negativos si se prolonga más de lo necesario (piensa, por ejemplo, en los ayunos promulgados por motivos políticos y que a menudo duran semanas), pero dentro de ciertos plazos de 24 horas, activa mecanismos que son beneficiosos.
Uno de ellos es la autofagia celular, un proceso por el que las células eliminan los componentes celulares envejecidos y dañados y los sustituyen por otros nuevos.
La autofagia favorece el proceso de regeneración celular, contribuyendo a mejorar la salud general y a ralentizar el proceso de envejecimiento.
La actividad física regular y la adopción de un buen estilo de vida también son factores que contribuyen a la regeneración celular, de ahí las recomendaciones en este sentido procedentes de las principales instituciones sanitarias, principalmente la OMS (Organización Mundial de la Salud).
FMD: un programa que imita los efectos del ayuno
Una pauta dietética como la Dieta de Simulación del Ayuno se ideó tras muchos años de investigación y está estructurada de tal forma que imita los efectos del ayuno sin forzar un periodo de ayuno más bien extenuante.
La dieta FMD, aunque genera los efectos metabólicos y fisiológicos deseados del ayuno, permite la ingesta de alimentos, aunque reducida. Se trata, en esencia, de un enfoque controlado que hace que este régimen dietético sea muy sostenible. De hecho, el desayuno, la comida, la merienda y la cena se realizan a las horas típicas de estas comidas.
¿Cómo está diseñado el programa Fasting Mimicking Diet?
La Dieta de Imitación del Ayuno es un protocolo de cinco días más dos días adicionales para volver a la alimentación normal. Este programa implica el uso de una caja que contiene 5 kits de alimentos basados en alimentos vegetales crudos. Cada kit es específico para el programa de 5 días y los preparados son sopas, bebidas, tentempiés, barritas, infusiones, suplementos, etc.
La ingesta calórica es de unas 1.150 kcal el primer día, mientras que el resto de los días la ingesta es de unas 800 kcal diarias.
La elección de un régimen hipocalórico basado en alimentos vegetales es el resultado de numerosos estudios y tiene por objeto seleccionar alimentos con propiedades fitoterapéuticas, antioxidantes y ricos en fibra dietética. El patrón dietético en cuestión «engaña» al organismo, que reacciona como si el sujeto estuviera realmente en ayunas.
¿Cuáles son los objetivos de la Tecnología que Imita el Ayuno?
Al adoptar el modelo FMD se fijan varios objetivos. Al tratarse de una dieta hipocalórica, un primer objetivo es la pérdida de peso (ligada a la pérdida de grasa visceral), mientras que los otros son la reducción de los niveles de glucosa, colesterol y trigliceridemia en sangre.
También es posible que el programa favorezca una disminución de los niveles sanguíneos de proteína C reactiva ( PCR ), un marcador de inflamación.