“El Gobierno de Canarias debería tomar la construcción del puerto de Fonsalía como un asunto capital porque no estamos hablando de un puerto para la comarca, sino para toda la provincia”. Es la reivindicación del alcalde de Guía de Isora, Pedro Martín, 21 años después de que se celebraran las primeras reuniones técnicas, en las que él mismo participó, que determinaron la necesidad de acometer una obra destinada a facilitar las conexiones con La Palma, La Gomera y El Hierro y a transformar la comarca suroeste de la Isla. Las últimas señales sobre esta iniciativa se remontan al 29 de mayo de 2015, con la aprobación por parte del Cabildo de la firma de un convenio de colaboración con el ente regional Puertos Canarios, del Gobierno de Canarias (Administración competente en su gestión) para intentar dar celeridad al proyecto.
A la espera de novedades, el alcalde isorano reclama dos modificaciones respecto al proyecto inicial. La primera afecta a toda la zona logística, que el mandatario sureño propone que se ubique en un área de 300.000 metros cuadrados en la conexión del anillo insular y el ramal que baja a Fonsalía, una demanda ya planteada a Gobiernos regionales anteriores. Entiende el alcalde que ese es el mejor lugar de desarrollo urbanístico y, sobre todo, porque así no ocupa una de las zonas de más valor del municipio como es la costa. El otro aspecto que el regidor municipal solicita es la creación de un área comercial que incluya una zona de ocio, tanto diurno como nocturno.
Pedro Martín subraya, no obstante, la coincidencia entre el Gobierno de Canarias, el Cabildo y el Ayuntamiento en la necesidad de sacar adelante el proyecto. Considera, eso sí, que su alto coste económico (más de 200 millones de euros) obligará a establecer prioridades “para ver en qué puertos se debe invertir en función de su importancia y de la trascendencia que tiene para los ciudadanos de esta isla y de la provincia”. El alcalde destaca dos aspectos positivos para sacar adelante la obra: la finalización, antes de que acabe el año (previsiblemente en noviembre) de la vía que enlazará el anillo insular con Fonsalía y la inexistencia de lugares declarados de Interés Comunitario (LIC) en la zona donde se construirá el puerto, lo cual, afirma, “debería facilitar mucho los trámites administrativos tanto con la Dirección General de Costas como con el resto de ámbitos del Gobierno”.
Instalación estratégica
El puerto de Fonsalía ha sido diseñado para que operen embarcaciones comerciales, deportivas y pesqueras. El proyecto, que abarcará una explanada de 6,4 hectáreas de superficie, incluye cinco atraques para buques comerciales que cubrirán las rutas con La Gomera, La Palma y El Hierro y capacidad para acoger hasta 470 barcos deportivos, con una línea de atraque que tendrá una longitud de 739 metros.
Esta infraestructura se construirá en una zona de gran valor estratégico, entre Playa de Las Américas y Los Gigantes, y su puesta en marcha generará un conjunto de servicios que incidirá en el desarrollo urbanístico y económico de la comarca, y de forma especial en los núcleos cercanos de Playa San Juan y Alcalá.
Fonsalía completará la red de puertos principales de Tenerife y supondrá una mejora de la actividad logística portuaria y de la conectividad con las islas occidentales. Sustituirá al puerto de Los Cristianos, cuyas comunicaciones con la red de carreteras se encuentran muy condicionadas por la expansión urbana, tal como se explica en el documento del Marco Estratégico de Desarrollo Insular, que especifica que una eventual ampliación tropieza con el obstáculo de tener que desarrollarse en un ámbito urbano altamente consolidado. Una vez que Fonsalía asuma el tráfico de pasajeros y mercancías, en Los Cristianos se concentrarán embarcaciones recreativas y de ocio, lo que a su vez revitalizará la oferta turística de Arona.
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