La Policía Canaria cuidará del patrimonio cultural

El Ejecutivo regional impulsa un acuerdo de colaboración con la Guardia Civil que tendrá como principal objetivo custodiar los yacimientos

Efectivos del Cuerpo General de la Policía Canaria (CGPJ) se encargarán de las tareas de vigilancia y custodia para la conservación del patrimonio cultural del Archipiélago, una misión prevista en el listado de competencias atribuidas por ley a esta fuerza policial desde su creación y que hasta ahora no se había desarrollado.

La decisión obedece al impulso dado al proyecto desde la Dirección General de Patrimonio Cultural en colaboración con la Viceconsejería de Medio Ambiente y Seguridad del Gobierno de Canarias. Los responsables de ambos departamentos, Miguel Ángel Clavijo y Blanca Pérez, confían en que las tareas comiencen en cuanto termine de planificarse las tareas de coordinación con la Guardia Civil y el reajuste de efectivos dentro del propio CGPJ.

A este respecto, Clavijo detalló ayer a este periódico que el principal paso ya está dado con la reunión mantenida en la Comandancia del Instituto Armado en Ofra (Santa Cruz de Tenerife) entre responsables del Gobierno, la Benemérita y la Policía Canaria.

Restos de silicona en una roca con grabados aborígenes en La Caleta (El Hierro). DA
Restos de silicona en una roca con grabados aborígenes en La Caleta (El Hierro). DA

No hay que olvidar que la Guardia Civil, a través del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), es quien hoy se encarga de la seguridad de este patrimonio. Como es natural, la predisposición del Instituto Armado es total por cuanto se considera un refuerzo apreciable en una materia para la que no siempre se puede contar con el número de efectivos deseado. Aunque en la cita de Ofra ya hubo entendimiento entre los mandos intermedios, en breve se celebrará otra cita enfocada hacia lo técnico.

Clavijo recordó que si bien el objetivo es salvaguardar todo el patrimonio cultural habrá especial atención al cuidado de los yacimientos, dado que se trata de los elementos del mismo más expuestos a sufrir actos de expolio o incluso mero vandalismo.

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