Ocho meses ha soportado al frente de su cargo, intentando reactivar el sector turístico de La Palma, abriendo nuevos mercados que consolidaran el destino insular en el marco de la competitiva escena turística y desde un posición en el contexto regional debilitada, el gestor del área de Turismo del Cabildo de La Palma, Miguel Ángel Santos.
Considerado como una personalidad en el mundo de la industria turística y creador años atrás de la marca ‘Costa Adeje’ para ese municipio tinerfeño, que colocó en una posición ventajosa como destino de calidad, y con una dilata experiencia política en la gestión, Miguel Ángel Santos ha tirado la toalla animado por circunstancias familiares pero impulsado por la fatiga acumulada tras comprobar durante meses que la agilidad en la gestión y la capacidad resolutiva no eran virtudes de los funcionarios del área con la que le ha tocado lidiar, circunstancia asociada a cierta pasividad conciliadora de la consejera, la socialista Alicia Vanoostende.
Miguel Ángel Santos decidió, hace ya dos meses, anunciar una retirada que no se dará a conocer oficialmente hasta el próximo pleno de la institución, que en su momento tuvo la oportunidad de crear la figura del director insular de Turismo pero que relegó la figura del gestor a un mero cargo de confianza sin atribuciones para tomar decisiones o trabajar directamente con los funcionarios, lo que supeditó su estrategia a la permanente intervención de la consejera Alicia Vanoostende.
Santos, que fue incorporado al área de Turismo en abril de este mismo año y presentado como la persona que potenciaría la consolidación del mercado palmero, actuando al mismo tiempo como interlocutor con el sector turístico a petición de los propios empresarios, ha ofrecido sus servicios al presidente del Cabilido y a la consejera de Turismo, con quienes mantiene una buena relación, una o dos veces en semana, una fórmula que se desconoce si será aceptada por el grupo de Gobierno y que pone en cuestión el nombramiento de un nuevo gestor (la figura del gerente del ya extinto patronato). No en vano, en abril de este mismo año y en un comunicado oficial, el propio presidente de la instución, Anselmo Pestana, reconoció que “la incorporación de la figura del gestor de área en el Servicio de Turismo del Cabildo atiende a una necesidad de refuerzo de las acciones que ya se están impulsando, a la vez que responde a una demanda del propio sector turístico privado”.
Al sector turístico insular, que conoce oficiosamente esta renuncia desde hace varias semanas, le preocupa la ausencia de Santos, formalizada desde el pasado día 16 de diciembre. Los empresarios del sector son conscientes de que su labor, aunque desarrollada con muchas limitaciones por la propia estructura burocrática del área de Turismo, estaba siendo necesaria para la consolidación de mercados, consecuente con el hecho indiscutible de que el “turismo prestado” que desde hace algo más de un año logra llenar la oferta alojativa insular, corresponde a una situación transitoria que coloca a la Isla como beneficiaria temporal por el rechazo a otros destinos tradicionales del litoral Mediterráneo.