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El Gran Telescopio Canarias vuelve a observar el Universo

Concluye la reparación de una pieza de uno de sus espejos, que tuvo fuera de juego a este gigante de la ciencia durante más de un mes

El mayor telescopio óptico del mundo volvió a observar el Universo la noche del jueves, después de pasar alrededor de 40 días inoperativo por la rotura de una de las patas que sujeta uno de los espejos que conforman el Gran Telescopio Canarias (GTC), un gigante de la investigación científica que corona el Observatorio del Roque de Los Muchachos.

Así lo confirmó el director del GTC, Romano Corradi, en declaraciones a DIARIO DE AVISOS, quien indicó que la pieza se terminó de instalar la tarde del jueves y durante la noche pudieron comenzar a observar con total normalidad.

Es más, el científico de origen italiano y afincado en La Palma desde hace muchos años, precisó que incluso han mejorado la observación y “ganado en eficacia” por la limpieza del espejo instalado. El telescopio vuelve así a recobrar la normalidad después de un lapsus de tiempo fuera de juego por una pequeña rotura que, sin embargo, requerió de un proceso complejo la reparación.

Tal y como informó en su momento este periódico, el proceso de reparación requería incluso de la construcción de un instrumental ad hoc para darle la vuelta al espejo y volver a colocar la pieza. Además, el pegamento con el que se unió la pata al espejo tuvieron que encargarlo a Estados Unidos.

El Gran Telescopio Canarias, hasta que no se construya el Telescopio Europeo Extremadamente Largo (E-ELT), en Chile, o el de Treinta Metros, en La Palma o Hawái, seguirá siendo el óptico-infrarrojo mayor del mundo.

Dispone de un espejo primario formado por 36 segmentos hexagonales que actúan como un solo cuerpo, además de un secundario y terciario. Una parte importante del mantenimiento va dirigido a garantizar que los espejos estén limpios para que reflejen la luz de manera óptima. La limpieza se realiza con nieve pulverizada de dióxido de carbono. Y aproximadamente cada dos años los segmentos del espejo se desmontan del telescopio para ponerles un nuevo recubrimiento reflectante de aluminio en su superficie.

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