La historia de Max y Aurora bien podría haber sido el guión de una película pero hablamos de una historia real. Aurora, una niña de tres años de edad desapareció al alejarse de su casa y adentrarse en un bosque en Queensland, Australia.
Fue entonces cuando Max, el perro de la familia, la siguió y permaneció con ella hasta que la encontraron 16 horas más tarde. La mascota fue quien ayudó a seguir el rastro a los agentes que buscaban a la niña para finalmente encontrarla. La hazaña de Max ha sido reconocida por la policía declarando al animal, que tiene 17 años, ‘perro de la policía honorario’.
Todo esto tiene mayor mérito debido a la avanzada edad del perro y a que es sordo y tiene una discapacidad visual.
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