El artículo en venta no puede ser más curioso: una pelota de playa de colores… gigante. A simple vista, podría ser una buena idea adquirir una para pasar un buen rato con amigos junto al mar o una piscina (olímpica, por lo menos). Sin embargo, tal y como dejó claro un usuario que, presuntamente, compró el artículo, no hay nada de divertido en hacerse con una de esas pelotas, que, a juzgar por su descripción, parece más un arma de destrucción masiva que un artículo de ocio.
El comentario, que fue dejado por el comprador el pasado mes de febrero, se ha hecho ahora viral con la llegada del verano, cuando su review ha sido descubierta por otros usuarios de Amazon, donde se vende la enorme pelota.
“Nos llevamos esta pelota a la playa y, tras tirarnos dos casi horas para hincharla, estuvimos jugando con ella durante 10 minutos llenos de diversión”, relata el usuario, llamado Reid Hamlin. “Entonces el viento se la llevó y la mandó rodando por la playa a unos 40 nudos. Destruyó todo lo que encontró a su paso”, afirma. “Los niños gritaban aterrorizados ante el gigante monstruo hinchable que aplastaba sus castillos de arena”, afirma en la opinión dejada en la plataforma de venta.
Y la cosa empeora: “Hombres maduros eran aplastados mientras intentaban salvar a sus familias”. “Al final tuvimos que dejar de correr tras ella porque la senda de dolor y destrucción que estaba dejando nos iba a costar una fortuna en tarifas legales”, dice.
El usuario asegura que perdieron de vista al enorme balón en Carolina del Sur, EEUU, “lo que dice algo bueno acerca de su durabilidad”.
El ingenioso comentario, tal vez dejado por la competencia en el mundo de los fabricantes de balones gigantes, ha convertido en relato de terror la experiencia de comprar esta pelota de colores, pero ha llenado de risas las redes sociales, que aún se preguntan si es una historia real exagerada o una broma
Hemeroteca
Publicidad
Esquelas