El PSOE palmero contó ayer con el respaldo de la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo, en la celebración de la tradicional Fiesta de la Rosa, que esta edición tiene un marcado carácter preelectoral, teniendo en cuenta la cita el próximo año con las urnas y que se acaban de proclamar la mayor parte de los candidatos locales, insulares y autonómicos de los socialistas en Canarias.
Carcedo hizo un balance de los primeros cien días de gestión del Gobierno de Pedro Sánchez, al que accedió recientemente al cargo de ministra tras la dimisión de Carmen Montón, por las presuntas irregularidades en un máster.
La responsable de Sanidad expresó también su inquietud por los datos que arroja el Observatorio de la Salud del Ministerio sobre Canarias, ya que existe una mayor preocupación entre los ciudadanos sobre la situación de la sanidad pública que en otras zonas del país y, además, “la preferencia por lo público frente a lo privado es menor”.
La ministra concretó que hay indicadores en materia sanitaria en los que Canarias está en la media del resto del país, como en el gasto per cápita, “pero otros nos dicen que la ciudadanía está preocupada por el sistema público”. En este sentido, sostiene que debe ser una prioridad “total” mejorar la calidad del sistema público, que “es el garante de la igualdad y que los derechos universales sean efectivos para todos los ciudadanos”.
Otro de los aspectos en los que el Archipiélago ocupa un lugar en la cola del país es la pobreza infantil. Precisamente, Carcedo fue comisionada del Gobierno de España para la lucha contra la pobreza infantil hasta que se hizo cargo de la cartera de Sanidad. En esta materia, defiende que “Canarias tiene que realizar, desde el ámbito autonómico y local, políticas fundamentalmente orientadas a la igualdad y específicas dirigidas a los momentos más críticos que afectan a los niños.”
En lo que se refiere al balance de los primeros cien días de Gobierno del PSOE, Carcedo destacó como principal característica la “recuperación de un clima político diferente”, valorando que se ha pasado a una situación de “esperanza e ilusión por el futuro”.
Del mismo modo, indicó que con Pedro Sánchez ha llegado un estilo de gobierno en el que, a su juicio, priman “el consenso, la negociación y el diálogo, sustituyendo a la imposición y a la crispación”. “Desgraciadamente estamos viendo que la crispación está intentando penetrar de nuevo en la política española por alguien que creíamos que ya habíamos olvidado, José María Aznar, que con la comparecencia última, en el Congreso de los Diputados, vuelve a protagonizar de nuevo esta sensación tan incómoda de crispación de la política española”.
La ministra socialista aboga por el ejercicio de la política al margen de la crispación y, por el contrario, basada en el análisis de los problemas que están presentes en la sociedad española, que “nos afectan y colectivamente tenemos que solucionar”.
Otro de los ejes de la acción del Gobierno de Sánchez que destacó Carcedo fue el impulso en favor de la recuperación de valores relacionados con la libertad y la democracia, mediante la supresión de “la simbología y los lugares que recuerdan” a la dictadura franquista, que “nos ancló cuarenta años en un retroceso histórico”. En clara referencia a la exhumación de los restos de Franco del Valle de los Caídos.
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