Bohemian Rhapsody se convirtió este lunes en una de las grandes triunfadoras en la 76ª edición de los Globos de Oro. Pese a que numerosos cinéfilos vaticinaban el éxito de la encarnación de Freddie Mercury debido a su excelentes cifras de recaudación en taquilla, el premio fue recibido por sus responsables con bastante asombro. Un sentimiento que para el protagonista del filme, Rami Malek, se convirtió rápidamente en bochorno cuando Nicole Kidman -encargada de anunciar el nombre de la película premiada- evitó felicitarlo, dándole la espalda.
El gesto se convirtió ipso facto en uno de los momentos más comentados por los espectadores de la gala, sobre todo, porque la actriz no estaba ignorando a unos de los maquilladores o diseñadores de la cinta, sino a su propia estrella, quien minutos antes había recibido el Globo de Oro al mejor actor dramático.
Esto fue, precisamente, lo que el presentador Jimmy Kimmel, ni corto ni perezoso, le preguntó a Malek en su programa. Tras mostrar las imágenes en varias ocasiones, el actor se tapó la cara con las manos por vergüenza. “Pese a que no lo parezca ahí, Nicole y yo nos conocemos desde hace tiempo. Así que pensaba que sería más fácil para mí acercarme y decirle hola, pero evidentemente no. ¡Todo es muy raro cuando están entregando un premio!”, reconoció Malek.
“Esto seguro que estas imágenes van a estar persiguiéndome en Internet toda la vida”, bromeó el protagonista de Bohemian Rhapsody.
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