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El Tenerife logra un punto tras empatar con el Mallorca en el minuto 93 (2-2)

Un gol de Tayron en la prolongación hizo posible que el cuadro blanquiazul sumase un punto ante un Mallorca que se puso 0-2 al inicio de la segunda parte.

Meritorio punto sumado por el CD Tenerife ante el Mallorca. Los blanquiazules nunca arrojaron la toalla frente a los baleares, que se vieron con un claro 0-2 nada más empezar la segunda parte. Pero un gol de Racic, el primero suyo como blanquiazul, y otro de Tayron del Pino, en el minuto 93 de partido, hicieron posible que los jugadores de Oltra sumasen un empate.

José Luis Oltra repitió el mismo once inicial que perdió en el Carranza, con Coniglio en la delantera

El cuadro local saltó al campo con la intención clara de mandar en el partido y de buscarle las cosquillas al Mallorca, equipo que en la primera vuelta le propinó a los blanquiazules una dura derrota, aún hoy recordada en el vestuario insular.
Lasso tuvo en sus botas la primera acción peligrosa del encuentro, con un disparo que se fue por encima de la meta de M.Reina.

Sin embargo fue el cuadro balear el primero en acertar sobre la meta de Dani. Un desajustes defensivo, con Alberto como princpal protagonista del mismo, lo aprovechó Estupiñán, a pase de Lago Junior, para marcar un gran gol tras tiro cruzado que no pudo evitar el cancerbero hispano-venezolano.

Tras el gol, un sector de la afición la emprendió con Alberto. Lo responsabilizó del 0-1 y le pitó cada vez que tocaba la pelota. Otro sector respondió a los pitos con aplausos del majorero.

El equipo local no se vino abajo y logró meter en su campo al rival, aunque sin crear ocasiones reales de peligro. Eso sí, estuvo cerca de marcar en el minuto 37 Malbasic. Una buena triangulación suya y de Lasso provocó una ocasión que desbarataron el portero del Mallorca y su defensa.

En la recta final de la primera parte, Jorge vio la quinta tarjeta amarilla, por lo que estará varias semanas sin jugar, ya que en la próxima tocaría el Reus y el partido no se jugará. Por lo que el defensa cumplirá ciclo en la siguiente jornada.

La segunda parte arrancó con la jugada que marcó el partido. Una cesión hacia atrás de Jorge y un desafortunado resbalón de Dani en el peor momento, fueron suficientes para que Budimir marcase el 0-2. Esta vez no hubo pitos. El Heliodoro enmudeció. No se creía que fuera posible acumular tanto infortunio.

Pero pudo reaccionar inmediatamente el Tenerife. Suso, de cabeza, se la dejó a Malbasic, que con toda la ventaja para marcar, estrelló la pelota en el larguero.
A esta acción le siguieron varias más de peligro para el Tenerife. Todas muy claras, como un a remate de Malbasic y gran intervención de Reina, o el cabezazo de Lasso, en plancha, que se fue fuera por muy poco. El Tenerife está negado con el gol, como demuestra en cada partido.

En el minuto 62 Nano regresó a la actividad tras superar una operación de hernia. El canterano relevó a un desafortunado Coniglio, quien apenas aportó cosas destacadas al ataque tinerfeño.

Precisamente fue Nano el que, con la testa, sirvió a Racic un balón que el serbio enganchó según le vino. Su disparo, seco y abajo, lo desvió el meta balear en una buena jugada de reflejos.

Racic no perdonó en la segunda que tuvo. El mediocentro fusiló cruzado a la escuadra tras una dejada de cabeza de Alberto. Los blanquiazules por fin cortaban la racha de 462 minutos sin marcar y, lo mejor, es que tenían tiempo para empatar, o incluso remontar.

Tras el tanto de los pupilos de José Luis Oltra, el partido se afeó. O lo afeó el Mallorca, que se empleó a fondo para que no se jugara a nada en el tiempo que restaba. Fruto de su juego duro fue expulsado, por doble amarilla, Pervis Estupiñán, quien cometió falta clara sobre Nano.

Esto sucedió en el minuto 85, por lo que al partido le quedaban cinco minutos, más otros cinco de la prolongación, para creer en el empate.

Y vaya que tuvo fe. En un balón colgado, Tayron del Pino, que había entrado al campo por Héctor para, a la desesperada, lograr un punto, marcó el gol de la esperanza en el minuto 93. El grancanario bajó una pelota dentro del área bermellona y su golpeo entra en la portería visitante tras tocar en Raillo. La grada saltó de júbilo.

Quedaban pocos minuto s para el final y los blanquiazules tenían fuerzas para intentar la remontada, pero no tuvieron más ocasiones de marcar, por lo que tuvieron que conformarse con un empate que de poco le vale en la clasificación.

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