música

Jordi Savall: “La música es una fuente de dignidad”

El genio de la música antigua, que cierra el Festival de Música de Canarias con 'Las rutas de la esclavitud', reivindica el derecho a decidir de Cataluña

Jordi Savall conmovió anoche al público que llenó el Teatro Circo de Marte con el concierto Las rutas de la esclavitud 1444 – 1888. Un ejercicio de recuperación de la memoria histórica, a través de la música, de uno de los pasajes más execrables de la historia de la humanidad: la esclavitud. Y lo hace a través de la música de las víctimas, los esclavos, que ha recuperado en la tradición oral de África y el continente americano.

Un concierto que hoy llega al Auditorio de Tenerife y que mañana cierra la 35ª edición del Festival de Música de Canarias en Las Palmas. Savall celebra la presencia de este concierto en las Islas. Un territorio que ha sido clave en el trasiego cultural entre Europa, América y África. “Canarias ha sido el puente principal de conexión entre el Viejo y el Nuevo Mundo. Un puente que creó un repertorio musical extraordinario, que se llaman villancicos de lenguas”, comentó durante la presentación del concierto en la capital palmera.

A propósito de este legado, rememoró una anécdota que vivió hace más de 15 años cuando se desplazó a la Catedral de Las Palmas para estudiar una colección de villancicos de principios del siglo XVII. Allí se encontró con la sorpresa de que el armario de estos manuscritos estaba vacío. “Yo me quedé muy sorprendido y el bibliotecario también. Entonces se hizo una investigación, incluso se llamó a la Interpol y, milagro, diez días después, estaban todos los manuscritos”, rememoró. Tras este suceso, el Cabildo aceptó financiar que se microfilmara el fondo, pero la iglesia se opuso. “Y a partir de aquí se me cerraron las puertas en Canarias”, dijo.

Puertas que se han reabierto al genio de la música antigua con este concierto en el que sube al escenario a unos cuarenta músicos procedentes de cuatro continentes, en un recital con el que pretende que estemos “tocados por la belleza y la emoción de la música y tengamos un poco más claro lo que pasó en esta historia para tener, quizá, un poco más de empatía con las personas que vienen de este mundo que destrozamos durante siglos”.

Así lo comentó durante la rueda de prensa que ofreció ayer en Santa Cruz de La Palma y en la que indicó que a pesar de que en el concierto “escucharemos algún lamento, veremos que las músicas están llenas de esperanza”. Para el musicólogo catalán, “los esclavos encontraban en su música la única forma de recuperar la esperanza. Cantando sus canciones, las de sus antepasados, hallaban una forma de conectar con lo que habían sido y de poder olvidar el sufrimiento que tenían”.

Savall está convencido de que la música puede contribuir a transformar la realidad. Algo que palpa en un proyecto en el que está inmerso con refugiados. “La música es una fuente de dignidad y es lo que nos permite aún dialogar entre oriente y occidente”.

En la presentación del concierto, el presidente del Cabildo palmero, Anselmo Pestana, valoró como “un regalo” la presencia de Savall en La Palma, de quien aseguró que se trata del “músico español vivo más importante”. El consejero de Cultura, Primitivo Jerónimo, añadió que es “un día histórico” para La Palma. Mientras que el alcalde de la capital, Sergio Matos, agradeció la elección del Circo de Marte para su estreno en las Islas.

La directora de la Fundación DISA, Sara Mateos, empresa que se suma este año al Festival con su apoyo para este concierto, valoró el carácter social de este proyecto, al tiempo que consideró fundamental que permitirá atraer gente joven a la música. Jorge Perdigón, director del Festival, destacó el inmediato “entendimiento” que alcanzaron con el “maestro” para que actuara en las Islas con este concierto en el que “la música nos ayuda a comprender la historia y la historia a la música”.

IDENTIDAD

Jordi Savall no elude afrontar el conflicto territorial que existe en España. “Intento explicar que el deseo que tiene el pueblo catalán, que quiere tener una cierta independencia, no es nada más que el deseo de un ser humano que quiere ser reconocido como tal, con su identidad, con su historia, con sus cosas buenas y malas”. El músico se muestra partidario de que “la gente pueda decidir democráticamente lo que desea” y señala que “si se hace bien, creo que ganarían en el referéndum los que quieren quedarse en España”. No le molesta que lo llamen músico español. “Yo me siento español y dentro de español, catalán. Y me siento europeo. Y me siento en casa aquí, en Sevilla y en Santiago de Compostela”. “Pero yo soy catalán como primera pulsación”, matizó.

En cuanto al estado de la música antigua en España, lamentó que apenas recibe apoyo de las instituciones públicas. Una problemática que hizo extensiva a toda Europa. “Mientras que en España hay 25 orquestas sinfónicas, con una media de entre tres y ocho millones de euros de presupuesto, de música antigua habrá unas diez, sin recibir subvención alguna o muy poco”, criticó.

En este sentido, indica que “la mentalidad de hoy en el nivel institucional de la música, es la misma que en el siglo XIX, cuando una orquesta sinfónica hacía todas las cosas”. Y así, todo lo que corresponde a la música anterior a dicho siglo, medieval, renacentista e incluso la barroca, queda fuera del paraguas de la protección y la promoción de las instituciones públicas. “Algo hay que hacer porque es como si quitásemos del Prado todas las obras anteriores al siglo XIX”, apostilló.

TE PUEDE INTERESAR