Se llama Helen Richards, tiene 59 años, es australiana y ha sido mordida por una pitón de metro y medio mientras estaba sentada en el retrete de su casa. A pesar del enorme susto que se llevó al ser protagonista de la peor pesadilla de cualquier ser humano, Helen tuvo suerte: la mordedura de este tipo de pitón no es venenosa.
“Salté del asiento con los pantalones bajados y cuando me giré para ver qué había ocurrido vi algo que parecía una tortuga de cuello largo dentro del inodoro”, ha declarado la víctima de la morededura. Por su parte, Jasmine Zeleny, la persona que sacó al animal del retrete, ha explicado que es muy común encontrar estos animales buscando agua en los inodoros durante las estaciones más secas: “Lo que seguramente ocurrió fue que la serpiente se asustó al no ver punto de salida cuando la señora se sentó”.
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