El Estabulario y animalario de la Universidad de La Laguna es un área que pertenece al Servicio General de Apoyo a la Investigación (Segai) y que da soporte científico, instrumental y técnico a grupos de investigación de la Universidad de La Laguna, otros centros docentes nacionales, de Europa y de Estados Unidos, y ofrece servicios y tecnología a los organismos, públicos o privados y a las unidades de investigación de los hospitales públicos tinerfeños. El centro de cría y suministrador cuenta con ejemplares de ratones, ratas, conejos, ranas y mosquitos que se están empleando en diferentes proyectos. En su momento tuvo también lagartos, perros y un mono.
La veterinaria y responsable del servicio María Rosa Arnau, explicó que el animalario está sometido a “una estricta legislación” que fija las “condiciones de conservación y cuidado de los animales”, así como la formación necesaria que debe poseer todo “el personal que trabaje con animales”, una capacitación que deben renovar, así como un “documento de transparencia” en el que exponen que todo lo que hacen “es visible y cumple la normativa”.
El centro cuenta con abundante equipamiento para mantener las condiciones optimas que precisan estos animales de investigación. El edificio dispone de varias salas de cría y mantenimiento de roedores, conejos, ranas y mosquitos en un ambiente controlado, laboratorios, quirófanos, y una zona totalmente aislada a la que solamente se puede entrar una vez se haya duchado, esterilizado y se hayan ataviado con ropa y calzado especial, mascarillas y gorros.
Arnau explicó que el coste de mantenimiento y preparación del edificio es costoso y el de los animales “es muy alto y es sufragado con cargo a los proyecto de investigación”. Cada una de las salas debe tener una temperatura concreta, el agua debe ser descalcificada, hay máquinas autoclave para limpieza y esterilización de jaulas, comederos, etc.
La veterinaria, que lleva en el animalario desde 1991, recalcó que “la sanidad de los animales es vital y no pueden coger ninguna enfermedad para que puedan servir de modelo de estudio”. “Hay animales sin sistema inmune (conocidos como desnudos por carecer de pelo y de la glándula del timo, donde maduran los linfocitos), utilizados para hacer trasplantes de patologías degenerativas o cánceres y observar su evolución. Los animales están en jaulas en un ambiente estéril, a las que se nutre con aire estéril”.
El animalario dispone de casi 2.600 ratones, de los cuales 1.289 están en la zona libre de patógenos. “Valen un auténtico disparate y su traslado es complicado. Hace pocos días se pidió un presupuesto para transportar 17 ratones a San Sebastián y nos pidieron 2.200 euros para trasladar tres jaulitas, por lo que, finalmente será el investigador quien se desplazará a Tenerife”. Los ratones más valiosos costaron 9.000 euros y son una pareja de transgénicos fluorescentes (rojo y verde) para estudiar el parkinson.
Observamos una colonia de crías de mosquitos Anopheles, capturados en el barranco de Tahodio, para los estudios del Instituto de Enfermedades Tropicales para incluir en las pinturas de las casas componentes para repelerlos -recordar que son los vectores que transmiten la malaria, o varias ranas que llegaron desde Estados Unidos para la investigación sobre canales del calcio. El centro dispone de cámaras para congelar semen y embriones, así como la manipulación genética. También organiza cursos para que los cirujanos puedan practicar en su quirófano.
Actualmente el estabulario cuenta con 29 proyectos de investigación vigentes, además de las prácticas de los grados del propio centro universitario, y acoge estudios de diversos doctores de los hospitales tinerfeños sobre varios tipos de cáncer, patologías neurológicas, ELA, dent, parkison, huntington, diabetes, sobrepeso, enfermedades renales y osteopáticas, etc. Durante la visita del DIARIO, dialogamos con los investigadores Silvia Velázquez, Elva Martín, Patricia García, Javier Castro y Daniel Perera, que trabajaban en sus proyectos.
El animalario de la ULL tiene ocho trabajadores y varios alumnos en prácticas, y recibe más de 500 visitas anuales de media.