Ya han pasado siete años y todavía no han podido encontrar al dueño de un boleto de Primitiva premiado con 4,7 millones de euros. Un total de 220 personas han reclamado el botín en una administración de San Agustín, en A Coruña.
En todo este tiempo, siempre se había confiado en la buena fe de Manuel Reija, el lotero que dijo habérselo encontrado. Sin embargo, la investigación, en el último mes, ha dado un giro de 180 grados. Un informe policial, entregado el pasado día 29 de julio en el Juzgado de Instrucción número 13 de la capital gallega, contradice todo lo pensado hasta el momento, según informó El Español.
Manuel Reija, según la investigación, pudo engañar al dueño del boleto para no entregarle el resguardo y que se quedara en su administración. De hecho, el 26 de junio de 2012, fecha en la que fue premiado, se validaron cuatro boletos –tal y como refleja el informe policial al que ha tenido acceso La Voz de Galicia–. Seis días después de su compra, el lotero comprobó si habían sido premiados.
El lotero, ese día, comprobó el boleto premiado en primer lugar, según consta en una secuencia de datos proporcionada por la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado. Y el terminal le indicó que había sido premiado. “Entregar al cliente. El resguardo es ganador del sorteo del 30 de junio de 2012. Llevar resguardo a la delegación”, le indicó. Pero Manuel no hizo nada. Es más, llegó a abonarle a la persona tres euros correspondientes al segundo resguardo y comprobó también los dos últimos, sin premio.
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