economía

Las empleadas del hogar, primeras víctimas de la subida del SMI

BBVA reconoce que aunque muchos trabajadores se han visto favorecidos con salarios mayores también hay destrucción de empleo sobre todo en los colectivos más desfavorecidos
Una empleada del hogar. El Español
Una empleada del hogar. El Español
Una empleada del hogar. El Español

Por El Español / M. Fresno

Nueve meses después de que el Gobierno aplicase, vía real decreto, el aumento del 22% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), las estadísticas confirman los peores presagios: un efecto negativo sobre los trabajadores más vulnerables. Las empleadas del hogar son las más afectadas tanto a nivel nacional como a nivel regional.

Los datos del Ministerio de Trabajo son claros. Mientras que la media del conjunto de trabajadores afiliados a la Seguridad Social aumentó hasta agosto un 2,55%, en el caso de los Sistemas Especiales del Hogar, se produjo una caída del empleo del 3,43%. Algo similar ocurrió con el Sistema Especial Agrario, donde la caída fue del 1,58%. En el caso de Canarias, esta caída del empleo fue del 1,5% desde enero a agosto y del 2,2% con respecto a agosto del año pasado.

“Hay destrucción de empleo en los empleados del hogar, frente a la creación del empleo general. También el sector agrícola está destruyendo empleo y en las Comunidades Autónomas en las que el SMI tiene especial incidencia, los datos de empleo van peor”, explicó el responsable de Análisis Macroeconómico de BBVA Research, Rafael Doménech.

“Para estimar los efectos del SMI en el paro habrá que esperar un año. Pero ocho meses después sí podemos decir que la creación de empleo se ha reducido a la mitad. No sabemos si es por la subida del SMI, por los efectos de una política fiscal más neutral o por la situación de la economía internacional. Aunque muchos trabajadores se han visto favorecidos con unos salarios mayores también vemos que la menor creación y destrucción de empleo se está centrando en los colectivos más afectados por el SMI”, señaló Doménech.

En este sentido, se pronunció la directora de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, Lola Pérez, que si bien alabó la iniciativa de subir el SMI, sí señaló que el error está en que “ha sido una subida directa de un 22% en un solo año, algo que rompe cualquier expectativa de las empresas, y no esta vinculada a la productividad”. Pérez indicó que la medida repercutirá sobre todo en aquellos sectores con salarios más bajos. Asimismo, explicó que la medida del registro horario también está produciendo efectos en el empleo puesto que “muchas empresas han tenido que reorganizarse para cumplir con los horarios”.

En el segundo trimestre del año, las horas extra pagadas cayeron un 19%, según los datos del INE. Se trata de la primera vez en 10 años que esa cuantía baja y coincide con el momento en el que los trabajadores están obligados a fichar en el trabajo.

TE PUEDE INTERESAR