“Injusta, innecesaria, imprudente y hasta de riesgo ante una posible recesión económica”. Así definió ayer el alcalde de Los Realejos, Manuel Domínguez, la penalización que le impuso el Gobierno de Canarias al Ayuntamiento por no cumplir la ratio de presión fiscal en el pasado ejercicio, es decir, por no subir los impuestos a los vecinos.
El incumplimiento establecido por el Fondo Canario de Financiación y contemplado en el Artículo 19 de la Ley 3/1999 fue por estar apenas un punto (71,9%) por debajo del 72,15% establecido y pese a que la media de ayuntamientos vecinos alcanzaron el 92,50%.
“Resulta curioso cómo otros municipios tuvieron que someterse a planes de ajuste años atrás por incumplir la estabilidad presupuestaria y optaron por subir impuestos para ir equilibrando su balanza, mientras que Los Realejos, que hizo bien la tarea y en siete años logró elevar el presupuesto y llevar a cero la deuda”, se encuentra en una “situación desprotegida” y afronta una nueva penalización económica “por no haber tocado los bolsillos a los ciudadanos”, declaró el alcalde durante una rueda de prensa en la que comunicó lo sucedido.
Debido a ello, el Consistorio deberá pagar 192.913 euros que se añaden a las penalizaciones anteriores de 2014 (151.589 euros); 2015 (157.071) y 2016 (161.803) ya que en 2017 sí se cumplió “quizás porque el resto de corporaciones modificaron los tipos de gravámenes”, manifestó Domínguez.
Esta cantidad, “para un Ayuntamiento como el de Los Realejos es una suma importante”, e influirá en los próximos presupuestos que el grupo de gobierno ya está elaborando para poder aprobarlos a tiempo y que entren en vigor, “como es debido”, el 1 de enero de 2020. En medio de esta labor, “nos encontramos con una nueva piedra en el camino que nos hace replantear todo el trabajo andado y las posibles modificaciones en los capítulos de ingresos y gastos”, apuntó el mandatario.
En estos momentos, adelantó Manuel Domínguez, el gobierno que preside “se encuentra en la encrucijada” de si subir o no los impuestos a los vecinos, pese a que dejó claro que el Ayuntamiento “no necesita obtener más recursos a través de la subida de impuestos porque sabe perfectamente equilibrar sus ingresos con las necesidades del pueblo”.
Al respecto, comparó ayuntamientos similares de la zona Norte, como La Orotava, Puerto de la Cruz, Tacoronte o Icod de los Vinos, en el que el tipo medio de gravamen aplicado en impuestos como el IBI, Actividades Económicas (IAE), Plusvalía, Construcciones o el de Vehículos de Tracción Mecánica, es superior a de Los Realejos.
Además, aclaró que no hay garantías que con un incremento de los impuestos se obtengan los resultados esperados, ya que éstos se analizan a año vencido y es ahí cuando se sabe si la presión fiscal del Consistorio estuvo por encima o por debajo del parámetro medio establecido.
Propuesta al Parlamento
Por todo ello, el alcalde consideró que los vecinos deben conocer “lo injusto” de esta penalización y confirmó que como diputado regional elevará una propuesta al Parlamento de Canarias con el objetivo de modificar los criterios del Fondo Canario de Financiación Municipal para el cálculo del indicador de esfuerzo fiscal.
“Mi municipio no merece un recorte tan importante como éste, ni como el que llevamos acumulando en los últimos años por encima ya de los 660.000 euros que hemos dejado de recibir y que podría haberse destinado a prestar más y mejores servicios e inversiones a los vecinos de Los Realejos”, manifestó el regidor local.
Por último, subrayó que “no quiere ningún premio ni entrar en un debate más profundo del Fondo Canario de Financiación. Lo único que quiero es que nos dejen plantear nuestra política fiscal”, sentenció Domínguez.
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