Ayer, a las 17.30 horas, Breña Alta y Los Llanos de Aridane se quedaban sin suministro eléctrico. Una situación, que, pese a ser subsanada 37 minutos más tarde por la compañía responsable, alertaba a numerosos comerciantes y vecinos de ambas localidades, que temían un nuevo cero energético en la Isla Bonita, como el que se produjo hace apenas unos meses en Tenerife, y que afectó a cerca de medio millón de usuarios.
Algunas zonas de El Paso, Tijarafe y Tazacorte también se habrían visto damnificadas por este corte puntual, según confirmaron a DIARIO DE AVISOS fuentes de Endesa. En total, se estima que la avería pudo afectar a cerca de 20.000 clientes, y, si bien se desconocen las causas exactas que produjeron el incidente, la citada empresa ha detectado que la interrupción del servicio tuvo su origen en la desconexión de dos grupos de producción en la Central Eléctrica de Los Guinchos, ubicada en Breña Alta.
Apenas media hora después de tener lugar el apagón, las mismas fuentes de la entidad señalan que fue restablecido el 50% del suministro, y diez minutos más tarde, la práctica totalidad de los hogares recuperaban la normalidad. Un episodio tras el cual, indican, “tendremos que hacer un análisis” de las instalaciones para localizar dónde se originó el incidente, sobre todo, a fin de evitar que pueda reproducirse con mayor severidad.
Recordemos que, en el mes de agosto, también una desconexión en los grupos de producción de la central eléctrica breñusca dejaron sin luz a cerca de 3.000 palmeros. Sin embargo, en aquella ocasión, una alargada humareda negra salía del inmueble, advirtiendo, incluso, a los vecinos que no se habían visto afectados por el fallo eléctrico. Lo cierto es que, tal como reconocía la compañía, no se trataba de un incidente que revistiera gravedad alguna, más allá de la expectacularidad del manto ennegrecido, proviniente de un tubo compresor.