
Diario de Avisos / M. F.
La presidenta de la comisión de Igualdad y Diversidad de la CEOE, Val Díez, presentó ayer un análisis sobre la brecha salarial de género en España, en el que se indica que si bien se ha reducido, en la actualidad está en el 12,2% por hora trabajada.
El informe señala que, a pesar de los avances en materia de igualdad laboral alcanzados en las últimas décadas, las distintas cifras y estadísticas muestran que la brecha salarial sigue siendo una “asignatura pendiente, tanto para España como para el resto de países de nuestro entorno”. Sin embargo, hay que reconocer que las diferencias salariales entre hombres y mujeres en España se sitúan por debajo de la media de la UE (16,9%) y de algunos países como Alemania, Reino Unido o Francia, habiéndose reducido significativamente en los últimos 15 años.
Algunos factores que influyen en esta diferencia salarial según este informe son, por ejemplo, el hecho de que las mujeres se han incorporado más tarde que los hombres al mercado laboral, lo que hace que estas cuenten con una edad media y unos años de antigüedad medios inferiores a los hombres. En cambio, las mujeres españolas tienen, en término medio, niveles de formación más elevados que los hombres. De hecho, la correlación positiva existente entre el nivel de estudios alcanzado y el salario obtenido, a diferencia del resto de factores considerados, la educación debería estar contribuyendo a reducir la brecha salarial entre hombres y mujeres.
Sin embargo, a pesar de ello, las mujeres tienen un mayor peso que los hombres en ocupaciones con salarios más bajos, lo que contribuye a incrementar las diferencias salariales entre ambos. Aún así, CEOE señala que se están dando pasos, ya que, por ejemplo, la proporción de mujeres en los consejos de las empresas del IBEX 35 ha experimentado un aumento muy significativo a lo largo de los últimos años, pasando del 3% en el año 2005 a alcanzar, 13 años después, el 24%, lo que supone una mejora de 20,7 puntos porcentuales. A pesar de los avances registrados, la proporción se encuentra todavía lejos de un equilibrio adecuado entre hombres y mujeres. En el resto de Europa, la proporción de mujeres directivas también es baja. Solo el 10% de las féminas ocupan un puesto de CEO. Como medidas correctoras en este informe se propone la igualdad retributiva, y para ello se pide incentivar la medición de las brechas salariales, tanto a nivel privado como público.
También se propone tomar medidas de conciliación de la vida familiar y laboral, como fomentar la corresponsabilidad de hombres y mujeres en las responsabilidades familiares, y la igualdad de oportunidades, para lo que será preciso incrementar la participación de la mujer en los órganos de decisión. Además, se plantea utilizar la educación y la cultura para concienciar y sensibilizar a toda la sociedad en materia de igualdad.