Los hermanos Padrón, Jonathan y Juan Carlos, de El Rincón de Juan Carlos, han duplicado su ADN gastronómico en el recién abierto restaurante Poemas en el hotel Santa Catalina Royal Hideaway, de las Palmas de Gran Canaria. Ambos restaurantes, situados a menos de 200 kilómetros en línea recta y separados por el océano Atlántico, ofrecen los mismos platos: en Los Gigantes (elaborados por los hermanos) y en la otra isla de manos de la joven herreña Iciar Pérez, de quien, hay que decir, que ha sabido captar la esencia creadora del restaurante estrella Michelin y volcarlas en el plato.
Poemas by Hermanos Padrón ha abierto recientemente sus puertas en el Santa Catalina que ha sido remodelado y que está gestionado por el Grupo Barceló con una apuesta clara por la gastronomía y también, por qué no decirlo, por lograr la ansiada estrella Michelin en este nuevo local.
El restaurante ofrece dos opciones al comensal: un menú ejecutivo (75 euros) y otro más largo denominado Poemas (90 euros). Los vinos, aparte.
Si se escoge el más largo nos encontramos con cuatro entrantes: Brioche frita con brandada de bacalao y ralladura de lima, bocadillo de rabo con mayonesa de pimienta fermentada, gamba roja en salsa nantua y café y empanadilla de gamba roja con salsa verde (esta última potente de sabores marinos).
En los platos principales hay ocho sugerencias que evocan el imaginario creativo de los hermanos Padrón. Ostra Gillardeau con jugo de tomate y limón negro, cada vez que se visita el Rincón de Juan Carlos elabora este molusco de manera diferente. La caballa marinada y limón, sabor y sencillez. El espárrago blanco a la parrilla con ‘pesto’ de queso Flor de Guía y pistacho, un ejemplo de las posibilidades culinarias de los quesos de las islas. La anguila a la benedictine, otro de los platos que bordan los hermanos. El tallarín de apio con crema de queso Comté y trufa crea adicción. El chipirón a la meunière Japón y Francia y la cigala, blanco de cigala y sriracha, excelentes. Y lujoso final de la propuesta principal del menú: molleja de ternera, remolacha y chipotle, acertada mezcla de sabores.
Si Juan Carlos se centra más en lo salado, Jonathan es el artífice de los postres que salen bien ejecutados del equipo de cocina de Iciar Pérez. Taco de maíz con ajo negro y yogur; violeta, plátano y palo cortado y chocolate Orelys, helado de mandarina y yozu. Sobresalientes y nada dulzones.
La carta de vinos ha sido escogida por las mujeres de Jonathan y Juan Carlos, Raquel Navarro y María José Plasencia, respectivamente, que tan bien lo hacen en El Rincón de Juan Carlos. Aquí, en Poemas, Esteban García es el encargado defender estas propuestas. Iniciamos los aperitivos con un Amalia, de Bodegas Rubicón, que distribuye Bodegas Torres. Se siguió con un espumoso Paisaje de las Islas, de Tajinaste; un Barbeito de Madeira; una malvasía aromática de Victoria Torres de La Palma; un Ikewen de Gran Canaria; Listán prieto Mission’s Grapes también de la Isla Bonita; Los Pasitos de Suertes del Marqués en La Orotava; malvasía aromática de Ycoden Daute Isora y, por último, un oporto Niepoort Colheito año 2007.
Poemas es la segunda apertura que hace la familia Padrón fuera de Los Gigantes (Santiago del Teide) donde se encuentra la casa madre. Ya en los primeros meses de 2018 afrontó el reto de ofrecer los platos que ha ido retirando de la carta en El Rincón de Juan Carlos, en una especie de memoria culinaria, en Maresía, en el Royal Hideaway Corales Resort, en La Caleta (Adeje).
Ahora abre en Santa Catalina, ambos hoteles están gestionados por el Grupo Barceló, donde ofrece sus propios platos con un equipo de cocina, capitaneado por la joven Iciar Pérez, quien ha trabajado en El Rincón de Juan Carlos, Maresía y el Bahía del Duque, y demuestra sus capacidades para afrontar este reto.
Poemas ha entrado con fuerza en Las Palmas, un territorio nuevo para la familia Padrón, pero que a la vista de esta fiesta gastronómica, promete y mucho.
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