Onagra Lorenzo Díaz, nacida en el barrio del Toscal en 1919, fue elegida Miss Carnaval de Santa Cruz de Tenerife en el primer certamen de belleza que se celebró en el Círculo de Amistad XII de Enero de 1935.
Lucía una fantasía titulada Vampiresa 1933, diseñada por su hermana, e inspirada en una película recién proyectada en El Royal Victoria.
La joven, que acababa de cumplir 16 años de edad, estuvo a punto de no participar en el concurso pues su padre había fallecido unos días antes. Por ello, para evitar las murmuraciones de sus vecinos del barrio del Toscal, se vistió en casa de una amiga y luego se trasladó hasta el Círculo de Amistad, ocultando su fantasía bajo una capa negra.
Onagra era muy atrevida para su época, pues el vestido largo que llevaba, de color pastel, diseñado en forma de espiral de cintura para abajo, tenía un gran escote en la espalda. En la cabeza llevaba un sencillo tocado, mientras que en la mano izquierda sostenía un violín. Le costó 6.000 pesetas. Por desgracia, el traje se quemó durante una fiesta.
Representaba al Círculo de Amistad XII de Enero, y junto a ella desfilaron otras cinco candidatas, cuyos diseños se denominaron Arco Iris; Andaluza vista por un francés; Fantasía; Cojín; y Antiguo español. Las crónicas periodísticas resaltaron la rivalidad existente entre las bellezas participantes y las costureras que habían elaborado los diseños.
Como premio, Onagra fue invitada a visitar La Laguna, siendo recibida en la Cruz de Piedra por la rondalla del Orfeón La Paz, cuyos componentes la acompañaron en su recorrido por las calles de la ciudad, ante numeroso público.
La joven fue una mujer adelantada a su tiempo, culta –tocaba el piano-, reivindicativa y solidaria. Siempre estuvo vinculada a la fiesta chicharrera, llevando con orgullo y distinción el haber sido la primera Miss Carnaval, hasta el 25 de enero de 1966, cuando falleció.
Debido a las peticiones hechas por distintos colectivos y particulares, el Ayuntamiento consideró que su recuerdo debería quedar inmortalizado en su ciudad natal, y acordó denominar con su nombre una calle en el barrio de Chamberí-Miramar.
La elección de Miss Carnaval volvería a celebrarse al año siguiente (1936) en el Círculo de Amistad XII de Enero, recayendo el título en la joven Ana de la Torre del Pino, representante de la citada Sociedad, que vestía la fantasía Ana Emperatriz de Austria, diseñada por Hermógenes González de Guisado.
Sin embargo, el estallido de la Guerra Civil paralizaría este certamen de belleza hasta 1965, año en que los Carnavales pasarían a denominarse Fiestas de Invierno, incluyendo en su programación este evento, ahora con el título de Reina del Carnaval.
En la gala, celebrada en el Teatro Guimerá, organizada por el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, resultó ganadora María de los Ángeles Gimbernat, que lucía la fantasía My fair lady, diseñada por María Isabel Coello, en representación del Casino de Tenerife.
En el año 2010, al cumplirse el 75 Aniversario de la elección de Onagra Lorenzo Díaz como primera Miss Carnaval, el Consistorio de Santa Cruz de Tenerife celebró un emotivo acto en el Teatro Guimerá para rendirles homenaje a todas las señoras y señoritas que durante esos años habían recibido el cetro de Reinas del Carnaval.
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