En pleno mes de abril de confinamiento, cuando apenas había franjas horarias, salir a tirar la basura era una de las actividades favoritas de muchas familias encerradas en casa por el temido coronavirus COVID-19.
Ante este panorama excepcional, en el que muchos niños no entendían qué ocurría, algunos padres han sido capaces de hacer cualquier cosa; hasta disfrazarse día tras día junto a una bolsa de residuos orgánicos. Esta es la historia de Jaime Coronel, de 34 años, que limpiando el trastero se topó con un disfraz de Olaf y Elsa que marcaron un antes y un después en su cuarentena.
El hombre y su hija Mara, de tres años, que residen en Puertollano (Ciudad Real), han salido desde entonces todos los días a las 20.00 horas con un atuendo diferente. Eso sí, padre e hija siempre a conjunto. Tal fue la novedad, que todo el vecindario esperaba con emoción el disfraz del día, justo antes de aplaudir la labor del personal sanitario en esta pandemia.
Olaf y Elsa (Frozen), Bella y Bestia, Spiderman, Goku (Dragon Ball) o Rapunzel y Pascal (Enredados) fueron algunos de los disfraces que usaron.