El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma ha procedido a la reapertura del Castillo de Santa Catalina, una de las edificaciones más singulares de la ciudad que tuvo que ser cerrada al público el pasado mes de enero por un reparo técnico en el contrato de gestión.
La edil de Cultura, Melissa Hernández, señaló ayer que “hemos regularizado el contrato que nos permite dar estabilidad en la gestión y puesta en valor de un inmueble fundamental para entender la historia de nuestra ciudad, una infraestructura que pertenecía al sistema defensivo de la capital y que fue declarada Monumento Histórico Artístico en 1951”. “No nos podíamos permitir el lujo de mantener cerrada una construcción con tantas posibilidades culturales y turísticas”, resaltó.
El Castillete, como se conoce popularmente a esta edificación, es de titularidad privada. La Administración municipal llegó a un entendimiento con sus propietarios para abrirlo al público a finales de mayo de 2015, después de llevar a cabo la reparación de cubiertas, instalaciones eléctricas, medidas de seguridad y la adaptación de la accesibilidad. El acuerdo para su apertura para residentes y visitantes, celebrando en su interior un amplio abanico de actividades culturales, se mantuvo en vigor hasta el comienzo de este año, cuando técnicamente se requirió la legitimidad de la propiedad.
Hernández confirmó que “hemos podido superar el aspecto burocrático vinculado al inmueble por sus propietarios y ahora lo más importante es que se ha abierto al público con mayor seguridad jurídica”.
