El presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, ha destacado “la calidad y el buen precio” del agua desalada que produce la Estación Desaladora de Agua de Mar (EDAM) del Oeste de Tenerife, que se gestiona a través del Consejo Insular de Aguas.
Así lo ha señalado durante una visita a la instalación en la que ha estado acompañado de los alcaldes de Granadilla, José Domingo Regalado; San Miguel de Abona, Arturo Eugenio González, y Arico, Sebastián Martín, quienes han ratificado el convenio firmado que permitirá a estos ayuntamientos abastecerse de agua a buen precio y liberar agua para poder utilizar la de los recursos subterráneos de la zona para la agricultura.
Al acto también acudieron el consejero de Sostenibilidad y Cambio Climático, Javier Rodríguez, y el gerente del CIATF, Javier Davara, quienes explicaron que la desaladora de Granadilla fue entregada al Cabildo por la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias en 2016 tras una inversión del Ministerio de Medio Ambiente de 16,5 millones, junto con una inversión de 5 millones más hecha por el Cabildo.
La estación desaladora, a día de hoy, está produciendo al 100%, es decir 14.000 m3 al día, es capaz con unas inversiones de poco coste incrementar a 21.000 m3. La liberación de 14.000 m3 al día, que es el objetivo deseable, supondría el riego del orden de 1.000 hectáreas de platanera con agua proveniente de recursos tradicionales.
El consumo energético es de 2,7 Kwh/m3 “muy por debajo de la media de consumo de otras instalaciones similares”. Martín explicó que actualmente, a través de distintas conducciones, el agua desalinizada llega al municipio de Arona, así como el depósito de cabecera situado en Lomo Manuel en Granadilla, de 10.000 m3.
“El convenio que firmamos hoy supone el compromiso de los tres ayuntamientos en abastecerse de un agua de alta calidad y a un precio muy competitivo que contribuirá a la mejora del servicio de las actividades industriales, domésticas y turísticas, y también permitirá que los ayuntamientos liberen aguas provenientes de los recursos subterráneos, es decir pozos y galerías situadas a cotas más altas, permitiendo ser utilizadas por el sector agrícola”, añadió.
Por su parte, el alcalde de Granadilla de Abona, municipio que alberga la instalación, destacó que si bien ya se está usando agua desalada para abastecer a la población que reside entre San Isidro y la costa del municipio, “el objetivo es que esta infraestructura que pueda abastecer a toda la población y además, que tenga capacidad de ampliación para que pueda ayudar también a los municipios de San Miguel y Arico”.
Por otra parte, el alcalde confió en que “pronto veamos el inicio de las obras de la depuradora, ya que para Granadilla de Abona es fundamental esta depuradora comarcal, cuya licitación esperamos que pueda salir adelante este año”.
El alcalde de Arico resaltó el avance que supone para el municipio la estación desaladora “porque vamos a conseguir que llegue agua de buena calidad a los barrios de Las Maretas, La Jaca, Las Listadas o Tajao, mejoras que va a percibir el conjunto de la ciudadanía”. Además, se refirió al “grave problema que existe en la comarca sureste al haber descendido de forma importante el agua de pozos y galerías, un problema para el riego agrícola que hay que abordar”. El alcalde hizo mención también a la necesidad de cerrar el ciclo de la depuración del agua en la zona.
El alcalde de San Miguel de Abona afirmó que la instalación “nos garantiza la estabilidad del suministro de agua en cantidad y calidad, sobre todo en la zona costera, que es la que más demanda tiene. Además, nos ayuda a recuperar agua para la zona de medianías y las zonas altas del municipio. Hoy hemos dado un paso pero estamos pensando ya en cómo podemos solucionar el problema de las zonas altas del municipio”.
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