“Es la rueda de prensa más importante que he dado, incluso más que la del dinero de Las Teresitas”. Así se expresaba ayer la alcaldesa de Santa Cruz, Patricia Hernández, durante la presentación de la puesta en marcha del plan de ascensores, iniciativa que defendió durante la campaña electoral, y por la que, recordó, recibió múltiples críticas, “hasta me llamaron mentirosa porque me decían que no se podía hacer”. Y es que, según anunció, dos bloques de edificios del barrio de La Salud, serán los primeros a los que se dotará de ascensores para que sus vecinos “dejen de estar atrapados en sus casas”.
La alcaldesa, acompañada por la concejala de Vivienda, Marta Arocha, firmó ante los medios de comunicación un convenio con los representantes vecinales de dos edificios en los que el Ayuntamiento capitalino se compromete a realizar la rehabilitación integral del edificio, mediante el convenio firmado con el Estado para la regeneración y renovación urbana (ARRU), y al mismo tiempo, a ampliar el crédito de esos trabajos con financiación municipal para proceder a la instalación de ascensores en ambos edificios, así como los necesarios recorridos de accesibilidad en sus exteriores.
La alcaldesa, en unas palabras que sonaron a despedida, defendió que “a esto vine: a mejorar la vida de la gente y a hacer realidad cosas que nunca se habían ni pensado ni propuesto en este Ayuntamiento y que dijeron que eran imposible para cumplir”. Explicó que “por primera vez Santa Cruz incluye dentro de la regeneración de los edificios la instalaciones de ascensores y que no solo sea la fachada y las humedades sino también de accesibilidad”, apuntando a que el acto de hoy “muestra el camino que debe seguir y en el que no se puede hacer ni un ARRU más sin que se estudie la incorporación de un ascensor”.
En el caso concreto de estos inmuebles del barrio de La Salud, se trata de dos edificios de 16 viviendas cada uno y cuya rehabilitación supondrá una inversión de más de medio millón de euros, concretamente son 552.000 euros. A esa cantidad ahora debe de sumarse el coste no solo de los ascensores sino también de la construcción de itinerarios accesibles y que correrá a cargo del ayuntamiento capitalino, “puesto que los ascensores no servirían de nada si en la puerta de la calle hay escalones y aceras que impiden salir del edificio”, en palabras de la propia alcaldesa. De esta manera, además de resolver serios problemas estructurales, mejorar la impermeabilización de las cubiertas, revestir las fachadas y modernizar las telecomunicaciones también se ha previsto acabar con uno de los problemas de accesibilidad interior y exterior.
Ya se ha verificado que es factible incorporar estos elevadores después de que se realizara un Estudio de Viabilidad Técnico, Económico y de Mantenimiento sobre accesibilidad. Hernández comunicó que además de estas actuaciones que se están llevando a cabo, se suma una convocatoria abierta, dotada con un millón de euros, para que cualquier comunidad de vecinos de Santa Cruz pueda pedir una subvención para instalar ascensores con cargo al Ayuntamiento.
Santa Cruz inicia el plan de ascensores en dos edificios del barrio La Salud
La alcaldesa Patricia Hernández defendió que este proyecto “es el más importante que he presentado en todo este tiempo”