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Una veintena de pateras han llegado a las costas canarias en los últimos cinco días

Estalla una crisis migratoria en las Islas, envuelta en polémica en Gran Canaria por el traslado de centenares de jóvenes africanos a apartamentos turísticos y la instalación de tiendas de campaña ante la falta de locales de acogida. El ministro de Migraciones, José Luis Escrivá, viene el miércoles para abordar el conflicto
PORTADA 07092020
Ayer llegaba una patera con 24 personas al puerto de Tazacorte, en La Palma, que está fuera de las rutas habituales de la inmigración. DA

EFE / AHORA.PLUS / DIARIO DE AVISOS

La llegada de pateras al Archipiélago ha registrado desde el pasado miércoles un acusado incremento. Al menos una veintena de embarcaciones han arribado a las Islas en apenas cinco días. Ayer, un cayuco con 24 inmigrantes de origen subsahariano llegó a las 20.20 horas por sus propios medios al puerto de Tazacorte, en La Palma. En la embarcación viajaban 24 varones que presentaban en apariencia un buen estado de salud, por lo que no fue necesario derivar a ninguno a centros sanitarios. Los inmigrantes iban a pernoctar y permanecer aislados, siguiendo el protocolo contra el coronavirus, una vez que fueran atendidos por personal de Cruz Roja y del Servicio de Urgencias Canario (SUC). Uno de los aspectos que más llaman la atención es que el puerto de Tazacorte, se encuentra fuera de las rutas habituales de llegada de inmigrantes al Archipiélago.

Los migrantes durmieron en el muelle en un hospital de campaña que montó el ejército, a la espera de que se haga este lunes la prueba PCR para determinar posibles contagios y posteriormente ser trasladados a un centro de acogida en colaboración con el Cabildo de La Palma.

 

LANZAROTE

De igual manera, un helicóptero de Salvamento Marítimo había localizado anoche, a unos 65 kilómetros al sureste de Lanzarote, una patera en la zona donde se buscaba desde el sábado una lancha neumática con 54 inmigrantes a bordo. El Helimer 222 se situó sobre la barquilla en torno a las 20.00 horas, en un lugar situado entre Lanzarote y Tarfaya que coincide con la última posición conocida de la zódiac. Al encuentro de la patera salió desde Arrecife la embarcación Salvamar Al Nair, que aún no había llegado a ella, por lo que al cierre de esta edición no existía confirmación del número de personas que viajaban a bordo. La alerta de búsqueda que se abrió el sábado indicaba que una neumática con 54 personas, entre ellas cuatro mujeres, había salido a las 3.00 horas desde la costa de Tarfaya.

Aunque el punto de salida es el más cercano a Canarias desde el continente -unos 100 kilómetros de navegación-, las ONG que trabajan en este ámbito están muy pendientes siempre de las alertas con neumáticas, pues varias de ellas han naufragado en lo que va de año y una con 63 personas se perdió recientemente, sin que se haya recibido noticia alguna de lo que les pasó a sus ocupantes. En las últimas semanas, el goteo de pateras ha sido constante, lo que ha provocado la saturación de los centros de acogida.

La jornada del sábado comenzó con la llegada de una embarcación irregular al muelle de Arguineguín, en Gran Canaria, sobre las 6.30 horas. A bordo viajaban 12 ocupantes. Horas antes, en la noche del viernes, otra había llegado al mismo destino con una veintena de personas. En total, ese día llegaron a Canarias tres pateras; el jueves fueron otras tres -una a Lanzarote y dos a Gran Canaria- con unos 50 ocupantes en total, y el miércoles fueron cinco, con unos 78 ocupantes.

Ya avanzado el sábado una embarcación irregular alcanzó Veneguera, en Mogán (Gran Canaria). Ocho personas desembarcaron y fueron atendidas por la Cruz Roja. Poco después llegaba otra, esta vez a Fuerteventura, y solo unas horas más tarde, otras dos a Gran Canaria, en Amadores y en Puerto Rico. Estas últimas, sobre las 21.00 horas y con 15 personas.

ARGUINEGUÍN MIGRANTES
Un total de 332 inmigrantes pernoctaron anoche en el puerto de Arguineguín, en Gran Canaria. DA

ARGUINEGUÍN

Un total de 332 inmigrantes pernoctaron anoche bajo tiendas de campaña en el muelle de Arguineguín (Gran Canaria), donde desembarcaron la mayoría de ellos tras ser rescatados por Salvamento Marítimo, algunos ya hace cinco días.

A la espera de que se habiliten otros recursos de emergencia en Gran Canaria para que las personas que llegan en patera pasen la cuarentena preceptiva, la Cruz Roja ha montado en el puerto de Arguineguín 17 tiendas de campaña para que los recién llegados tengan un techo provisional mientras les realizan las pruebas PCR. Aquellos que reciben un resultado positivo son derivados de inmediato a otra instalación en Arinaga, donde continúan la cuarentena en aislamiento, pero el resto duerme con sus compañeros de patera hasta que se les asigna un centro de acogida en Gran Canaria o en otra isla.

Cada tienda acoge solo a los ocupantes de una misma embarcación, con la salvedad de que se trate de personas que navegaban en barquillas diferentes, pero se mezclaron en la Salvamar que los rescató (cosa que ocurrió la madrugada del sábado con tres pateras en las que viajaban 47 varones magrebíes y que fueron auxiliadas por la embarcación Menkalinan de Salvamento Marítimo). El fin de esta distribución es procurar mantener la separación de los grupos y prevenir contagios cruzados de COVID-19.

Las 332 personas que se hallan en el puerto de Arguineguín tras la llegada de ocho pateras a Gran Canaria en apenas 24 horas (entre la madrugada del sábado y la de ayer) conforman posiblemente la cifra más alta albergada hasta hora en el muelle, solo superada por la que había antes de que derivaran a Arinaga a los que habían recibido una PCR positiva. Se trata tanto de inmigrantes de origen magrebí como subsahariano. Solo tres son mujeres, que comparten una tienda pequeña. La alcaldesa de Mogán, Onalia Bueno, y el patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Arguineguín, Ricardo Ortega, ofrecerán hoy una rueda de prensa para analizar “la situación y sus consecuencias en el municipio”.

Cruz Roja intentó a principios de verano montar un campamento de acogida y emergencia en unos terrenos cedidos por la Autoridad Portuaria en el polígono industrial de Arinaga. Su plan, auspiciado por la Secretaría de Estado de Migraciones, era contar con un recurso con capacidad para albergar de 800 a 1.000 personas. Sin embargo, cuando solo había comenzado a montarlo, tuvo que levantarlo por la oposición del Ayuntamiento de Agüimes, municipio al que pertenece Arinaga.

La red de acogida de Gran Canaria se encuentra desbordada por la constante llegada de pateras y cayucos, pero también por la necesidad de devolver a los ayuntamientos espacios que cedieron con ese fin durante el estado de alarma, pero que ahora necesitan. Esa situación llevó el viernes pasado al Gobierno central a encargar a Cruz Roja que acondicionara un complejo de apartamentos turísticos de Maspalomas para realojar a inmigrantes. En ese complejo, vacío por la crisis que vive el sector turístico, fueron hospedados 265 inmigrantes que hasta ahora estaban en varios municipios.

Tras conocerse este traslado, la alcaldesa de San Bartolomé de Tirajana, Concepción Narváez, pidió en redes sociales un trato digno para estas personas, pero criticó que se las trasladara a apartamentos turísticos. Las críticas a esta medida han crecido en redes sociales y a ello ha contribuido la difusión de bulos, como un vídeo con imágenes falsas en el que se ve a varios presuntos migrantes disfrutando de una piscina.

BULOS Y XENOFOBIA

El sábado se conoció, además, un ataque “racista y xenófobo” con piedras, como lo calificó la directora general de protección a la Infancia y la Familia del Gobierno de Canarias, Iratxe Serrano, contra una instalación de emergencia en la que se encontraba una veintena de niños migrantes no acompañados guardando la cuarentena tras llegar a Gran Canaria. El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, visita el miércoles las Islas para analizar junto al Gobierno regional los sistemas de detección de pateras y las condiciones de acogida de los migrantes.

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