La industria cultural en Canarias aglutina a 5.544 empresas, que dan trabajo a 31.600 personas. Eso supone, aproximadamente, el 3,5% de la población activa. Estos datos los ofrece el Ministerio de Cultura y Deporte del Gobierno central en su Anuario de Estadísticas Culturales correspondiente a 2020. Y si ahora los relacionamos con los de la Encuesta de Población Activa del último trimestre de ese mismo año, que indican que el desempleo en el sector alcanzó en las Islas el 36,86%, no es difícil concluir que estamos ante una situación que, como poco, puede calificarse de muy delicada.
“Hay una parte del sector cultural, la más industrial, que tiene que ver con las empresas de sonido e iluminación, con las de infraestructuras y las de servicios, con los promotores y, en suma, con esas personas que dan vida a los proyectos de artistas y creadores”, explica Jairo Núñez, presidente de la Asociación de la Industria Musical Canaria (Aimca), “que es la que hoy se halla más paralizada por las consecuencias de la pandemia”.
El presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, y el vicepresidente, Román Rodríguez, presentaron el 22 de enero un plan de ayudas extraordinarias dirigido a los subsectores que han resultado más afectados por los efectos económicos derivados de la COVID-19. Esta iniciativa está dotada con una cuantía de 400,8 millones de euros, de los que 165 millones se distribuyen como ayudas directas a fondo perdido y los 235,8 millones restantes corresponden al aplazamiento del Impuesto General Indirecto Canario (IGIC) del primer trimestre de 2021 (195 millones) y deudas fiscales durante seis meses.
Sin embargo, en un principio este programa regional se centra en la restauración, la hostelería, el comercio y las empresas deportivas. Desde Aimca, que engloba a cerca de 70 compañías, entre productoras y empresas de servicios de la cultura, solicitan que también figuren los profesionales pertenecientes a este subsector como beneficiarios de la estrategia del Ejecutivo regional para la reactivación económica. Una medida que, a su vez, se integraría en una respuesta más amplia, conformada por diversas actuaciones, que la asociación ha trasladado al Gobierno de Canarias. A este respecto, está previsto que representantes de la asociación se entrevisten este lunes, 22 de febrero, con el viceconsejero de Hacienda del Gobierno autonómico, Fermín Delgado.
La petición de Aimca y otros integrantes de la industria cultural, como, por ejemplo, los de las salas de cine, la comparte el portavoz parlamentario de Sí Podemos Canarias, Manuel Marrero, quien se ha dirigido a las consejerías de Economía, Industria y Hacienda para que en este bloque de ayudas se incluya “a los autónomos, asociaciones y empresas culturales” más dañadas. “El Parlamento y el Gobierno de Canarias reconocieron a la cultura como bien de primera necesidad [octubre de 2020], lo que ya supuso un salto cualitativo con respecto a lo que teníamos hasta entonces”, subraya Marrero. “La cultura es un sector muy frágil que a menudo no cuenta con el grado de protección que existe en otros ámbitos laborales”, añade el diputado regional. “De manera que, aunque es indudable su alta capacidad productiva, pues multiplica por mucho lo que se invierte en él, por culpa de la pandemia su facturación ha caído en torno al 70%, y mientras que la destrucción de empleo en otros sectores se sitúa en cerca del 25%, aquí supera ese porcentaje en más de 10 puntos”.
Manuel Marrero pone de relieve que el Archipiélago se convirtió, tras la irrupción de la COVID-19, en la primera comunidad autónoma en elaborar un paquete de ayudas específicas para toda la cadena cultural y creativa, “incluso antes que el propio Ministerio de Cultura”. “Pero, claro -apostilla-, la pandemia se prolonga y la Viceconsejería de Cultura y Patrimonio Cultural cuenta con un presupuesto limitado, por lo que es fundamental que se implique todo el Gobierno de Canarias”. El político tinerfeño expresa un moderado optimismo acerca de la inclusión del sector en el plan de rescate del Ejecutivo. A este respecto, el próximo pleno del Parlamento de Canarias, este martes y miércoles, será clave. “Es de suponer que el presidente, Ángel Víctor Torres, lo anuncie este martes”, precisa Marrero.
En la misma línea se manifiesta su compañero de filas en Podemos, y viceconsejero regional de Cultura y Patrimonio Cultural, Juan Márquez: “Estoy convencido de que el Gobierno atenderá la demanda que hace el sector de la cultura más vinculado a la industria, a una actividad que va desde la iluminación al vestuario, desde la sala de cine que tuvo que cerrar, porque ni siquiera hay películas que exhibir, a la empresa que se encarga del montaje de la infraestructura de un concierto”, subraya. “Es un volumen muy importante al que la Viceconsejería le resulta muy complicado llegar, por las limitaciones presupuestarias y también porque debemos dar respuesta a toda la estructura cultural”.
“Nuestro presupuesto ahora está enfocado hacia la recuperación del sector. Debemos impulsar la actividad cultural, de la cual somos un motor muy importante, trabajando junto con las corporaciones insulares y locales, con las pymes, los autónomos y todo ese tejido asociativo”, subraya Márquez, quien pone de relieve que el departamento que dirige ha invertido ya más de seis millones de euros en ayudas a “toda la cadena de valor que conforma la industria cultural” en el Archipiélago. “Se habla mucho del turismo y la hostelería, pero, ojo, en el sector de la cultura la pérdida de empleo se sitúa por encima del 35%”, apostilla.
VIABILIDAD
“En Aimca representamos a estructuras empresariales que pueden estar conformadas por entre 6 y 100 personas, por ejemplo, y es obvio que mantenerlas en estos momentos sin ningún tipo de facturación es insostenible”, señala Jairo Núñez. “Con las limitaciones para hacer frente a la pandemia -agrega-, en la actualidad en Canarias no se pueden organizar espectáculos a los que acudan más de 400 personas y nosotros nos dedicamos, precisamente, a una actividad que genera muchos empleos y cuenta con un público a partir de 500, 600 o 1.000 personas”.
Jairo Núñez detalla que en el conjunto de propuestas que Aimca plantea para que el sector pueda salir adelante en un tiempo tan complejo se estima en ocho millones de euros la cuantía total de las ayudas que debería recibir, basándose en una serie de criterios y teniendo en cuenta las pérdidas que se han generado. “Si en el sector cultural son del 70%, en el caso de la industria musical en Canarias las pérdidas alcanzan el 90%”, precisa. “Una compañía teatral, por ejemplo, aún puede asumir una representación en un teatro ante 150 o 200 personas, pero cualquier actividad que organice la industria musical con un público de 1.000 personas, simplemente, no puede llevarla a cabo”.
A este respecto, entre los datos con los que trabaja Aimca se especifica que solo durante el pasado año la industria musical de las Islas sufrió pérdidas directas por valor de 50 millones de euros e indirectas de 300 millones de euros. En contraposición con estas cifras, la Asociación de la Industria Musical Canaria recurre a los datos del Anuario de Estadísticas Culturales de 2020 para reflejar que el sector al que representa mueve un volumen de negocio de 800 millones de euros, mientras que el consumo cultural se ha calculado que asciende a 500 millones de euros, en este caso, de acuerdo con los datos que facilita la SGAE.