El estadounidense Jaycee Carroll, con sus 13 puntos del último cuarto, decantó para el Real Madrid una lucha de poder a poder contra el Lenovo Tenerife (84-76), que vendió cara su derrota hasta el final con un fantástico partido del brasileño Marcelinho Huertas (23 puntos) y solo permitió la decimoquinta victoria seguida del líder con el explosivo final del americano.
Los viejos rockeros, que nunca mueren, hicieron sonar las guitarras como el mejor de los conciertos que haya visto el WiZink Center en otros tiempos prepandémicos. Carroll (37 años) decidió al final un duelo que hasta entonces había gobernado Marcelinho (37), el mejor ariete contra el muro blanco sostenido por el caboverdiano Walter Tavares (15 puntos y 7 rebotes) y el acierto del argentino Nico Laprovittola (21 puntos, 5 de 9 en triples y 9 asistencias).
El Real Madrid, que aún tiene reciente la salida del argentino Gabi Deck rumbo a la NBA, no pudo estrenar a su sustituto, el francés Vincent Poirier, inscrito pero casi sin entrenar con sus nuevos compañeros, que vio el partido desde una banda. Tampoco se vistió el estadounidense Trey Thompkins, aún no recuperado de una lesión.
No le iba a la zaga en bajas el Lenovo Tenerife, sin el estadounidense Spencer Butterfield, el griego Georgios Bogris ni el exmadridista Dani Díez, y con el escolta estadounidense Charles Jenkins, fichado desde el Olympiacos, también en la banda. Pese a ello, vendió cara su piel para quebrar su racha de seis victorias seguidas en la Liga Endesa, con ráfagas del georgiano Giorgi Shermadini (15 puntos y 6 rebotes) y un meritorio duelo del interior bosnio Emir Sulejmanovic (12 puntos y 7 capturas).
Nadie diría que el Real Madrid viniera cansado del clásico del domingo ante el Barça, porque arrancó el duelo imperial en defensa con un Tavares inabordable atrás y acertado al triple, 3 de 4 en los primeros cinco minutos (13-2).
Rompió el apagón tinerfeño Shermadini, con 5 puntos recién salido del banco. “Estamos mirando cómo tiran”, se lamentaba el técnico visitante Txus Vidorreta en el tiempo muerto. Con la segunda falta de Tavares, el Tenerife pudo sumar en ataque, pero Usman Garuba y Sergio Llull mantuvieron la renta blanca (24-16).
La reacción del Tenerife fue fulgurante. Con Marcelinho Huertas a los mandos y triples de Sulejmanovic y Sergio Rodríguez igualó el duelo (26-26, min. 13), y al tercer intento Shermadini les puso por delante desde la línea de libres. Carlos Alocén compensó a un Madrid sorprendentemente errado al triple (2/7), pero el Tenerife no perdió comba y Bruno Fitipaldo puso la igualdad al descanso (38-38).
Del vestuario emergió de nuevo Tavares, ganándole las partidas a Shermadini y con él la ventaja blanca (52-42, min. 25), mientras el Lenovo aguantaba con las maniobras de Huertas pese a estar peleado con el triple, fallando 6 en este cuarto, entre ellos varios liberados, que permitieron mantener la renta local (59-49) para el parcial definitivo.
No se podía dar por enterrado al equipo con más acierto triplista de la Liga, y lo demostraron Huertas, Aaron Doornekamp, Fran Guerra y de nuevo el brasileño, en modo exhibición (64-65, min. 33), pero respondieron con las mismas armas Garuba y Carroll, que arrancó su decisiva exhibición no solo acertó desde la línea sino penetrando y provocando faltas para despegarse levemente (72-68, min. 36).
Huertas siguió remando, pero otro triple certero de Carroll, un mate tras recuperación del sueco Jeff Taylor y los tiros libres del de Wyoming (EEUU) recuperaron los ocho de renta (82-76) y dejaron el camino expedito para la victoria del Real Madrid ante un Lenovo Tenerife que le hizo sudar hasta el final.