Al grito de “¡lucha, lucha, lucha, el pueblo está en la lucha!”, afectados por la oleada desahucios en Santa Cruz de Tenerife aprobaron ayer en asamblea popular seguir con la acampada de protesta que llevan a cabo desde hace hoy diez días frente a la sede de Presidencia del Gobierno de Canarias, a pesar de las promesas realizadas a sus portavoces por el propio presidente, Ángel Víctor Torres, y sus consejeros de Derechos Sociales y Vivienda, Noemí Santana y Sebastián Franquis, respectivamente.
Allí estaba Sandra, a quien le amenaza un lanzamiento con fecha del próximo día 26 de su piso en Finca La Multa, donde vive con sus dos gemelas de cuatro años y que fue portada el lunes de DIARIO DE AVISOS. También gritó Estefanía, que a sus 20 años ve cómo la sombra del desahucio la acecha junto a su bebé en el piso de Ofra. Con ellas estaba igualmente Cristo, con dos menores y pendiente de si tiene que dejar su hogar en San Isidro, y Gesail de 30 años en Cobasa con su pequeño diagnosticado por una enfermedad…
Nadie expresó ni un atisbo de duda a la hora de respaldar que continúe la acampada de protesta tras conocer por los portavoces de la misma, Lolo Dorta y Eloy Cuadra, el resultado de la cita que, todo hay que decirlo, el Ejecutivo regional planteó al máximo nivel.
“El único compromiso al que pueden llegar, nos dicen, es que cuando se acabe la moratoria el próximo 9 de agosto ellos ya están trabajando en un decreto del propio Gobierno de Canarias para que no se desahucie a ninguna familia”, dijo Dorta a los allí congregados a primera hora de anoche, “y también nos dicen que trabajarán mano a mano con nosotros para estudiar caso a caso y buscar una solución a cada uno”, continuó. “Ellos se están agarrando a qué tipo de vivienda se puede comprar, pero nosotros replicamos que, si hay voluntad, las leyes se pueden cambiar”, apuntó el activista. “Pero si levantamos el campamento porque se encuentra solución a 20 familias, en dos meses estamos en las mismas”, razonó Dorta.
Tras sus palabras, la decisión de seguir con la acampada fue aprobada de forma unánime por los presentes, como se ha dicho.
En cuanto a la postura gubernamental, fue ofrecida por el consejero regional de Vivienda, Sebastián Franquis, quien detalló que “hemos compartido información, y nosotros les hemos explicado que estamos trabajando con los afectados de El Tablero [en alusión a 17 personas amenazadas de desahucio en el número 42 de la Subida a El Tablero, y que cuentan con nutrida representación en la acampada], y que pasa por un programa que llevamos a cabo con los ayuntamientos llamado Canarias Hogar, y les hemos explicado que estamos en negociación con las entidades que reclaman, y que las negociaciones van bien. También les informamos de que estamos en conversaciones con el Ministerio con vistas al final de la moratoria, y que si ellos no piensan alargarla nosotros tenemos previsto aprobar un decreto propio a finales de este mes para que esa protección se siga manteniendo”. Para Franquis, el programa citado está funcionando porque “hemos ya frenado 505 desahucios en las Islas, y por eso les pedimos recabar datos sobre cada caso. Es verdad -reconoció- que la solución pasa por la vivienda social, que no se construye en Canarias desde hace tantos años [12], pero hemos comprado viviendas por Visocan para estos casos”, apuntó.
Activistas anuncian una huelga de hambre para dentro de una semana
Parte de los activistas que participan en el llamado Campamento por la Dignidad, ubicado desde hace hoy diez díaz frente a la sede de Presidencia del Gobierno de Canarias anunciaron ayer que, si en una semana, no encuentran razones para desistir de su protesta, se pondrán en huelga de hambre, una medida sin duda extrema pero que todo apunta a que están dispuestos a llevar a cabo. El anuncio se produjo anoche en el lugar de la acampada y fue llevado a cabo por Lolo Dorta, conocido activista de la Plataforma 29-E, siendo coreado por no pocos de los presentes. Dorta también hizo un reclamo a todo tipo de plataformas sociales existentes en las Islas, a las que pidió prescindir de “viejas rencillas o motivaciones políticas” para que se sumen a esta manifestación de la que insistió, “no nos moveremos hasta que todas las familias canarias cuenten con un techo digno”. Resta añadir que una de las causas de esta acampada radica en el fracaso de la supuesta moratoria aprobada por el Gobierno de España, que no ha impedido la sucesión de desahucios en territorios como Canarias, donde la pobreza viene de lejos.
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