La deformación aumenta en La Palma y hoy se inicia un despliegue científico

El proceso preeruptivo que vive el volcán de Cumbre Vieja (La Palma), especialmente desde el pasado sábado, cuando diera comienzo el mayor enjambre sísmico de los últimos años (más de 1.000 temblores localizados), ha despertado el interés de científicos de toda España. Una inquietud que se ha visto acrecentada aún más por el hecho de que la deformación de la corteza de la Isla haya pasado de los 1,5 centímetros del martes a los seis el miércoles. Y, de acuerdo con los datos recabados por el Instituto Geográfico Nacional (IGN), ayer esta cifra alcanzaba los 10, como parte de la intrusión magmática estudiada por el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan).

Según fuentes consultadas por DIARIO DE AVISOS, a lo largo de la jornada de hoy se desplazarán a La Palma miembros del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), tales como el prestigioso volcanólogo Vicente Soler, para estudiar in situ el fenómeno. Además, el Gobierno regional desplegará drones en el entorno afectado por la actividad sísmica, con el objetivo de monitorizar la temperatura del terreno. Por otro lado, también participarán en las investigaciones relativas al suceso integrantes del Instituto Geológico y Minero de España (IGME), organismo que había solicitado a la Delegación del Ejecutivo central en Canarias la activación del programa Copérnicus de la Unión Europea.

Este último plan, mediante la técnica de la interferometría y haciendo uso del satélite Sentinel, permitirá obtener imágenes de la superficie palmera para ubicar de manera precisa las deformaciones de la corteza. Por el momento, en este sentido, los dispositivos que han arrojado los datos más relevantes sobre localización del desplazamiento del terreno han sido las siete estaciones GPS que el Involcan tiene distribuidas en la Isla Bonita. De hecho, el ente que dirige Nemesio Pérez ha enviado a cuatro expertos a realizar tanto tareas de reparación de la red instrumental de vigilancia permanente como para la toma de muestras que posibiliten conocer lo que está trayendo consigo el movimiento del magma.

SISMOLOGÍA

La madrugada del miércoles al jueves dio un respiro a los palmeros, con menor cantidad de seísmos y de una magnitud más baja de la que se había experimentado desde principios de semana. Sin embargo, una vez llegado el mediodía, se reactivó la actividad sísmica, hasta el punto de que, a las tres y media de la tarde, se tuvo constancia de un temblor percibido por la población de El Paso, con una magnitud de 3,1 y a una profundidad de seis kilómetros. Es decir, cada vez más cerca del nivel del mar.

Es más, en la reunión del Comité Científico previsto en el Pevolca (Plan de Protección Civil y Atención de Emergencias de Canarias por Riesgo Volcánico), se pusieron sobre la mesa los datos y, tras culminar el encuentro, se lanzó una advertencia: es de esperar que el enjambre tenga “una evolución rápida a corto plazo”, con la presencia de terremotos más intensos en las localidades en alerta, que son Los Llanos de Aridane, El Paso, Fuencaliente y Mazo.