Cientos de vecinos de Soyons participaron el pasado sábado en una ‘marcha blanca’ organizada por Roberto, un grancanario de 28 años que fue asesinado la semana anterior mientras hacía cicloturismo a orillas del Ródano (Francia).
La víctima, residente en los Países Bajos, recibió una treintena de golpes con algo de punta afilada a manos de un o varios agresores de los que nada se sabe aún por motivos que también siguen sin esclarecerse.
Aunque un vecino llamado Michel que paseaba a su perro encontró al paisano aún con vida, el canario falleció tras ingresar en un hospital.
La prensa local no deja de mostrar el asombro y la preocupación de los lugareños por la extremada violencia empleada en este crimen, aún por resolver y en el que trabajan las autoridades locales.