
Primer cuarto
Gran inicio, sobre todo en defensa, del Lenovo Tenerife, que maniató al Andorra (12-3). Los ataques largos de los locales propiciaban un marcador corto que solo varió tras un triple de Paulí. Ibon Navarro tuvo que parar el encuentro a falta de un minuto para el final, cuando el Canarias ganaba 16-8. Sus cuatro pérdidas resultaban clave.
Un triple a una mano, completamente inverosímil, de Marcelinho Huertas sentenció los primeros diez minutos (21-8).
Segundo cuarto
Desarboló el Canarias a su rival en los cinco primeros minutos del segundo cuarto. El 31-12 era fiel reflejo de lo que sucedía en pista, con una defensa local que llegaba a desquiciar al ataque andorrano.
Dos canastas seguidas de Jelínek (31-17), provocaron que Vidorreta pidiera un tiempo muerto para cortar de raíz la posible reacción de su rival.
Aunque el duelo pareció trabarse, dos individualidades, volvieron a permitir a los locales obtener una buena renta (35-20) antes de que se llegara al descanso con 35-22.
Tercer cuarto
Los andorranos salieron mejor tras el paso por los vestuarios. Miller McIntyre asumió responsabilidades y acercó a los suyos (38-26). La respuesta llegó desde las manos de Wiltjer. Triple, 41-26 y comienzo de un intercambio de canastas que favoreció a los visitantes (41-33).
Una técnica señalada a Salin permitió al Andorra volver a meter miedo (44-36). Dos grandes acciones, de Wiltjer y Huertas, obligaron al banquillo visitante a pedir tiempo (49-36). A golpe de triple, el Lenovo Tenerife lograba mantener las diferencias, aunque no acabara de poder romper el partido.
Eso llegaría gracias a dos triples de Sastre, uno de ellos sobre la bocina, que logró dejar las cosas en 64-44 a falta de un solo cuarto.
Último cuarto
Un triple lanzado por Guerra unida a una primera canasta de Miller McIntyre, un robo de balón para posterior triple del mismo jugador hizo que Vidorreta pidiera tiempo muerto (64-52). Tras lo visto, Andorra necesitaba que ocurriera ‘algo raro’ para lograr el triunfo y la relajación local, de darse, podía provocarlo.
Una técnica, sumada a una antideportiva que había cometido anteriormente, llevó a Miller McIntyre al vestuario, mientras Marcelinho anotaba para los suyos (68-54).
Hannah, con seis puntos, mantuvo con vida a los suyos (74-65) pero el Canarias no permitió que se le fuera la victoria (79-70).