La conexión de las necesidades del mercado laboral con la formación que reciben los futuros trabajadores es la base sobre la que se levanta el plan Santa Cruz Impulsa, con el añadido de que esa conexión va dirigida fundamentalmente a las personas en riesgo de exclusión. Para ello, el Ayuntamiento de Santa Cruz ha presentado esta iniciativa, dotada con 4 millones de euros, a una treintena de entidades del denominado tercer sector, con las que trabajará los tipos de cursos que se impartirán. Ayer, en el Centro Municipal de Formación y Empleo, los distintos colectivos pudieron escuchar de primera mano el plan del Ayuntamiento, así como aportar sus primeras impresiones.
Tal y como explicó el alcalde, José Manuel Bermúdez, que estuvo acompañado del edil delegado de la Sociedad de Desarrollo, Alfonso Cabello, y la concejala de Atención Social, “este es un proyecto donde pretendemos que el mundo de la inserción laboral y el mundo de los servicios sociales trabajen conjuntamente para conseguir formar y que accedan a un trabajo personas de difícil inserción laboral” y recordó que “hay personas que han conseguido un trabajo, pero que no pueden salir de los servicios sociales por que no le es suficiente para llegar a fin de mes, por lo que este programa pretende que la gente encuentre trabajo, pero que también salga de la espiral de la ayuda social a través también de la cualificación y mejora de sus capacidades”.
“La finalidad -continuó el alcalde- es que las personas se formen y lleguen al mercado laboral, facilitar una cualificación y pactar con empresas la inserción”.
