
Las zonas de ocio del área metropolitana tinerfeña que en anteriores fines de semana han sido escenario de alteraciones del orden público tales como reyertas y enfrentamientos contra las fuerzas de seguridad no registraron esta vez incidentes de relevancia, a buen seguro que por el efecto disuasorio provocado por el refuerzo que tuvo lugar en los dispositivos de la Policía Nacional para prevenir estos hechos, y que sindicatos como la Confederación Española de Policía ya habían reclamado. Ajeno a ellos, lo único relevante fue una bronca a primera hora de ayer en el Intercambiador capitalino entre jóvenes que volvían del Sur y que saldó con tres heridos leves, de los que solo uno requirió asistencia.