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Va por ti, Victoria

Al hilo de la celebración de 8 de marzo como día internacional de la mujer trabajadora, tengo la oportunidad de leer una entrevista a la Ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, en la que declaraba que «El gran reto es retener el talento femenino e impulsar su liderazgo»

Por María Dolores Pelayo | Al hilo de la celebración de 8 de marzo como día internacional de la mujer trabajadora, tengo la oportunidad de leer una entrevista a la Ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, en la que declaraba que «El gran reto es retener el talento femenino e impulsar su liderazgo», y aunque la ministra se estaba refiriendo al papel de las profesionales la ciencia, la tecnología y la innovación, -como ejes esenciales para el desarrollo socioeconómico de España-, las mujeres que participan plena y equitativamente en estas áreas a pesar de los avances, aún existen obstáculos que frenan su integración ante la “la sistemática invisibilización de sus investigaciones, lo que se une al cuestionamiento social de su dedicación y a la segregación sexual, vertical y horizontal“ , lo que viene ocurriendo en muchos otros ámbitos de la vida de las mujeres, ocasión para la Ministra de evidenciar esa realidad también en el sistema científico, tecnológico e innovador español, y yo diría también en otros sectores como ocurre en el tejido empresarial en el que las mujeres siguen tropezando con barreras visibles e invisibles que les impiden participar, influir y liderar de forma plena su experiencia, reflexión que viene a mi mente ante la campaña que se ha abierto ante la renovación de la Presidencia de la Confederación Provincial de Santa Cruz de Tenerife,(CEOE-Tenerife), donde se presenta por primera vez una mujer, la joven empresaria Victoria González Cuenca, contra el actual secretario general de la patronal, Pedro Alfonso.

No debe desconocerse que los obstáculos arraigados y los estereotipos que han tenido que superar tantas y tantas mujeres que, contra viento y marea, han sido capaces de dejar atrás estos hándicap, desde la convicción de que no se puede seguir privando al mundo del potencial de más de la mitad de la población mundial, porque tal pretensión, no ha sido un obstáculo insalvable para las mujeres, pues así ha sido, superado por la voluntad de tanta emprendedora. Pero, aunque hay indicios alentadores de mejora, las estadísticas reflejan la existencia de la inequidad de género.

En efecto, los hechos son tozudos, y algunas estadísticas en pleno siglo XXI dicen que en nuestro país se ha acelerado la presencia de la mujer p.e en la I+D+I, en apenas tres años, según el informe Mujeres e Innovación 2022, de manera que solo falta orientar aquellas estrategias, acciones e instrumentos que aceleren e impulsen los cambios que necesitamos y queremos. Valga como ejemplo el dato de que España supera hoy la media europea en número de mujeres innovadoras y científicas, hasta llegar a ser el sexto país a la cabeza en igualdad de género, de manera que los esfuerzos no han sido baldíos.

Cierto que queda camino por recorrer, pero nosotras, las mujeres, despreciando el augurio de Soros de que íbamos a necesitar para culminar nuestra tarea casi un siglo más, ignorando el poder y la razón que nos asistía, vamos a ganar esta batalla alineadas con las directrices de la Comisión Europea. Para ello estaremos, además, apoyados por el I Plan Estratégico para la Igualdad Efectiva entre Mujeres y Hombres 2022-2025, el principal instrumento de Gobierno de España para orientar las actuaciones que nos harán avanzar en su consecución de los objetivos.

Debemos esforzarnos pues, a través de la acción, en conseguir las demandas para alcanzar la participación plena y equitativa de las mujeres en todos los ámbitos y niveles. Ese es el camino y no el que ofrece el candidato Pedro Alfonso, quien al parecer y a juzgar por las quejas de ciertas patronales sectoriales han alertado de la falta de transparencia e irregularidades en el proceso electoral en la Patronal CEOE. Se equivoca el candidato al aprovechar su situación actual, secretario general de la patronal, si se va en contra del pleno cumplimiento de los principios de igualdad, libre concurrencia, transparencia y buena fe que rigen en la Corporación empresarial.

Conozco a la candidata a presidir la confederación, Victoria González, directora financiera del Grupo Chafiras, una mujer emprendedora, que tiene bajo su responsabilidad dirigir uno de los grupos empresariales más importantes de Tenerife. Cuando decidió dar el paso me alegré por ella y por los empresarios y empresarias de Canarias.

No hay mejor momento para exponer que es una joven valiente, gran profesional, con una formación y preparación envidiables, fruto de la dedicación a los negocios de la familia, pero también de su vocación social, de apoyo a la empresa canaria. No hay nada mejor que leer su curriculum de mujer profesional, donde ya no solo revela su esfuerzo en su formación con numerosos títulos otorgados por acreditadas escuelas de alta dirección, auditoría de cuentas o licenciaturas en administración y dirección de empresas, sino su asistencia a numerosos eventos que han ido conformando su preparación y la gerencia del grupo de empresas, líder en la distribución de materiales de construcción.

He sido a lo largo de mi vida, defensora de la igualdad, algo que es difícil de entender a pesar de las numerosas ocasiones en que he tenido la oportunidad de explicar: La naturaleza humana no tiene que ver con esto sino con la inteligencia y el sentido común de los seres humanos que poblamos la tierra. La inteligencia no está en un sexo, la naturaleza la ha repartido entre los dos sexos. Y no creo que haya sido desigual su atribución, sino que se ha despreciado, durante miles de años, la inteligencia de las mujeres por una miserable fuerza muscular que imponía la doctrina. No discuto esta teoría, pero si creo, después de tantos años de trabajar contra las injusticias, que ante la estupidez humana de no reconocer eso, de que la inteligencia se reparte entre todos los seres, me ha parecido ha llegado la hora de que reconozcan su error y cambien.

Tengo enfrente a una joven valiosa, emprendedora, colaborativa, y honesta persona que está deseando ayudar a su tierra. Quien la conoce sabe que no exagero. Va por ti Victoria, eres la mejor candidata.

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